La denuncia de Desmemoriados ante la Fiscalía por los incumplimientos de la legislación de memoria en Santander pide que se cite a declarar a la alcaldesa y Ceruti

El propio Ayuntamiento está incumpliendo varios acuerdos plenarios instando a cumplir la Ley e incluso tiene un listado de denominaciones alternativas que deben llevarse al Pleno
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La denuncia ante la Fiscalía Superior de Cantabria que ha presentado este mismo miércoles el colectivo de recuperación de la memoria histórica y colectiva Desmemoriados por el incumplimiento de la legislación en materia de memoria histórica y democrática que supone el mantenimiento en los nombres de las calles de Santander de decenas de referencias a protagonistas de la dictadura franquista incluye la petición de que se cita a declarar a la alcaldesa de Santander, Gema Igual, y al concejal de Cultura, Javier Ceruti.

Más allá de la exaltación de esos nombres y valores que supone el mantenimiento de esos nombres (las denominaciones de las calles no se configuran como un mero repaso a la historia, sino como homenaje a personajes y sus valores, como se evidencia cuando fallecen figuras queridas en la ciudad como pudo ser, por ejemplo, Vital Alsar) , la denuncia se detiene en el incumplimiento que se supone de la Ley.

Los delitos que piden que se investiguen encajan en el artículo 410 del Código Penal , desobediencia y resistencia al cumplimiento de una obligación legal, y acarrean penas de multa o inhabilitación para cargos públicos.

En concreto, según recoge el texto, al que ha tenido acceso EL FARADIO, se refieren la la Ley de Memoria Histórica de 2007, la aprobada en los años de Zapatero; o la aprobada en 2021 específicamente por el Parlamento de Cantabria, además de acuerdos del propio Pleno de Santander y pasos dados hasta la fecha por el propio Ayuntamiento de Santander.

LAS LEYES

Según recuerdan, la Ley 52/2007, de 26 de diciembre (la de la época de Zapatero) incluye en su preámbulo y articulado la ambición de “suprimir elementos de división entre los ciudadanos (…) con el fin de fomentar la cohesión y solidaridad entre las diversas generaciones de españoles en torno a los principios, valores y libertades constitucionales”, lo que plantea a través de obligaciones legales en su articulado como la retirada de escudos, insignias, placas y otros objetos o menciones conmemorativas de exaltación, personal o colectiva, de la sublevación militar, de la Guerra Civil y de la represión de la Dictadura (art 15.1), con la salvedad de que tengan valor artístico o histórico, o de estricto recuerdo privado sin exaltación de los enfrentados.

Respecto a la Ley cántabra, inciden en que esto incluye un procedimiento para requerir a las autoridades competentes la retirada de escudos, insignias, placas, inscripciones y otros objetos o menciones, realizados en conmemoración, exaltación personal o colectiva, del golpe de Estado de 1936 y de la represión subsiguiente.

Entre 2016 y 2017 sólo se modificaron tres calles: División Azul pasó a llamarse ‘La Secada’; ‘Columna Sagardía’ se cambió por ‘Las Rederas’; y ‘Alcázar de Toledo’ se renombró como ‘Las Ánimas’.

LOS ACUERDOS PLENARIOS

La petición de Desmemoriados también se refiere a acuerdos y disposiciones municipales

-Como un acuerdo del Pleno aprobado en 2015, que hablaba de que las medidas se adoptaran “de inmediato”, otro en 2022 que daba un plazo de un mes para plantear las alternativas,

-O los pasos dados por el Consejo de Cultura, que ya determinó en 2015 las calles afectadas (18, además de dos monumentos, a los que se añadió otras siete calles y plazas que con mínimos cambios dejaban de exaltar la dictadura y cambiar las referencias militares por geográficas, que fueron las pocas cosas que se hicieron. O este mismo órgano en 2022 en el que se derivó el proceso a un Pleno de esta Comisión que debía constituirse y que después debería constituir una Comisión Sectorial, pasos que la Alcaldía debería encomendar a la Concejalía de Cultura.

Poco después, en mayo de 2022 la directora general de Cultura del Ayuntamiento presentó propuesta de modificación de denominación de los viales, junto a listado presentado por el concejal del área con las propuestas de nuevas denominaciones presentadas por particulares y colectivos, pero se volvió a derivar al Consejo Municipal de la Cultura que aún no está constituido.

No obstante, la demanda alude también al Reglamento de Honores y Distinciones de Santander, que establece en su artículo 24 que “la denominación de calles, plazas, parques será competencia del Pleno Municipal, que las aprobará a propuesta de la Comisión de Cultura, y que ya existen varios acuerdos plenarios que o recuerdan el objetivo genérico de cumplir la Ley o establecen obligaciones concretas, además incluso de propuesta de denominaciones alternativas.

Según recuerdan, la competencia para fijar el orden del día de los plenos corresponde a la alcaldesa, y de las comisiones a quien ejerce las funciones de Presidencia, que en este caso es Gema Igual Ortiz.

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