Una concentración recuerda este miércoles a las dos hermanas que hace un año aparecieron muertas en su vivienda en la calle Burgos
El viernes se cumplirá un año desde que murieron María Mercedes y María Ángeles, las dos hermanas, mayores y que vivían solas, que estaban pendientes de su desahucio y que fueron encontradas muertas en su vivienda en la calle Burgos, en Santander.
Tenían fecha notificada de su desahucio, aunque fue aplazado, pero esa notificación no les llegó.
En su recuerdo, hay una convocatoria de concentración este mismo miércoles a las 19.30 horas en la Plaza del Reenganche, convocada por la PAH, STOP DESAHUCIOS, la Plataforma de Pensionistas de Santander y las Asambleas Feministas Abiertas de Cantabria.
El asunto puso sobre la mesa la letal mezcla que supone la soledad no deseada de las personas mayores, la exclusión social por la vivienda, la falta de recursos de los servicios sociales para atender el incremento de necesidades, los cambios urbanos que hacen que donde antes había vecinos que reforzaran lazos ahora haya un escenario de oficinas o locales cambiantes o vacíos y la perspectiva de género, toda vez que la soledad no deseada de las personas mayores afecta a muchas mujeres, con impacto en su salud.
Entre 2015 y 2020, Cantabria ha visto como el número de hogares unipersonales de mayores de 65 años pasaba de suponer el 36,3% del total (INE, 2015) a significar el 42,4% en 2020.
Del total de personas mayores de 65 años que viven solas la inmensa mayoría siempre son mujeres: uno de cada tres hogares unipersonales de la comunidad corresponde a mujeres mayores y la encuesta también revela que el 69,4% de estas mujeres son viudas.
Según datos del INE detallados por UNATE, la Universidad Permanente, de las 29.600 viviendas unipersonales con mayores registradas en la Encuesta continua de hogares 2020, 20.600 corresponden a mujeres. Esa cifra ya supone el 69% de las viviendas unipersonales de personas mayores y el 29,5% del total.
La Universidad Permanente UNATE, junto a la Fundación Patronato Europeo de Mayores (PEM) había elaborado ya el primer estudio regional sobre mujer mayor y soledad, con el apoyo de la Dirección General de Igualdad del Gobierno de Cantabria, que arrojó cifras como que un 32% de las mujeres mayores de 65 años de Cantabria sienten un grado significativo de soledad.
La investigación reveló que la calidad de las redes de apoyo de estas mujeres no es la deseada:
-Un 30% (22.400) de las encuestadas no cuenta con una red de amistades a la que acudir y un 11% (8.400) no dispone de una red familiar sólida.
Además, 8 de cada 10 mujeres que sintieron soledad en otras etapas de su vida, sufren de soledad en la vejez.
Y 9 de cada 10 mujeres que dicen tener una salud mala sienten soledad y lo mismo siente el 50% de las que consideran su salud como “regular”.