Pasaje Seguro convoca a recordar a las víctimas de la «criminal masacre» de la valla de Melilla de hace un año, con una concentración el sábado 24 de junio a las 12.00 horas en Santander, en la calle Burgos (junto a la ONCE).

El grupo ciudadano considera que la muerte de al menos 37 personas entre Melilla y Nador el 24 de junio de 2022, a las que hay que añadir al menos a 77 personas desaparecidas, fue «un crimen de la policía marroquí que contó con la complicidad de las fuerzas de seguridad españolas».

«Complicidad respaldada en todo momento por el Ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska», apostillan, añadiendo que «no es una afirmación temeraria», sino que «las filmaciones e investigaciones que se fueron publicando en los meses posteriores, muestran la operación de acoso y apelotonamiento de los migrantes contra la valla cerrada, que llevó a cabo la gendarmería de Marruecos; muestran el acceso a territorio español de policías marroquíes para sacar por la fuerza a personas migrantes que habían conseguido cruzar; muestran la inhumana denegación de auxilio a centenares de personas apiñadas en el suelo».

«Ni el gobierno marroquí, ni el español, ni la fiscalía han abierto una investigación digna de ese nombre; muchas familias buscan todavía noticia de sus seres queridos», lamentan.

Recuerdan que tanto el Defensor del Pueblo como el Consejo de Europa han denunciado formalmente la responsabilidad española en la deportación ilegal de muchos de los migrantes que lograron cruzar la valla «a despecho de la negativa constante, y mentirosa, del Ministro del Interior».

Para Pasaje Seguro, este «crimen ejemplifica como pocos la naturaleza real de las políticas migratorias de la Unión Europea (UE)».

Y enumeran políticas como el «incumplimiento flagrante» de los derechos de asilo y refugio, la «subcontratación de la represión fronteriza».

Así, recuerdan que «a inmensa mayoría de los que intentaron cruzar la valla el 24 de junio pasado provenían de Sudán y Sudán del Sur, la práctica totalidad de los mismos eran refugiados sin paliativos, pero no había ni hay posibilidad alguna de solicitar el derecho de asilo en el lado marroquí de la frontera sur, no hay ni había oficinas ni consulados, no hay nada».

Además, recalcan que «el cierre de fronteras, y el pago a países terceros de la calidad democrática de Marruecos, Libia y Turquía por frenar a toda costa a las personas migrantes lleva a masacres como la de Melilla, o la de la semana pasada en la costa griega, o la de ayer en aguas canarias». «No hay ninguna intención ni de organizar la recepción de refugiados en las fronteras, ni de abordar la migración desde otra perspectiva que no sea la de la represión», recriminan.

El grupo ciudadano exige la implantación de una política migratoria basada en los Derechos Humanos, y en el reconocimiento del derecho de las personas a migrar en condiciones seguras.

También exige la asunción de responsabilidades por el comportamiento inaceptable de las fuerzas de seguridad españolas el 24 de junio, siendo la primera de esas responsabilidades la dimisión del Ministro del Interior. Asimismo, exige el establecimiento de cupos migratorios suficientes y gestionados desde los países de origen, el abandono de la militarización de las fronteras, y la puesta en marcha de un plan de salvamento «público y eficaz» que atienda a los migrantes que acceden a las fronteras de la UE.

Ante las próximas elecciones generales Pasaje Seguro pide a los partidos que se presenta, que se comprometan con una política migratoria que se ciña a los apartados citados. Pide sobre todo a la ciudadanía «que dé su voto a quien con su programa y con su práctica se comprometa a cambiar las políticas migratorias, inhumanas y racistas que amenazan a nuestras sociedades».