Cantabria registra este año 10 accidentes laborales mortales confirmados; la mayor cifra registrada en los últimos 16 años por el Instituto Cántabro de Seguridad y Salud en el Trabajo (ICASST), que hoy ha informado de 9 personas fallecidas en los centros de trabajo hasta el pasado mes de junio sin contabilizar aún el del transportista cántabro del pasado 18 de julio en Cacicedo de Camargo.

Según aclara UGT-Salud Laboral, esta decena de accidentes laborales mortales implica el mayor número de muertes en el trabajo desde que en 2008 el ICASST publica estadísticas oficiales porque «los 9 contabilizados de enero a junio es la mayor cifra junto con la del año 2009 y si se añade el ya conocido en julio ya superaría todos los registros hasta esas fechas».

El sindicato agrega que el pasado mes de junio se ha añadido a la lista de personas fallecidas en su puesto de trabajo un profesional de la explotación forestal y silvicultura; que se une a otros cinco en el sector primario (cuatro en la pesca y uno en la ganadería y agricultura), uno en las actividades sanitarias y servicios sociales y dos en el transporte, sin contabilizarse todavía el del pasado 18 de julio ni el registrado el 27 de junio en Ontón porque correspondía a una empresa asturiana y se contabilizará en el Principado.

Según las estadísticas de los seis primeros meses de este año facilitadas hoy por el ICASST, los accidentes laborales descienden un 39% con 2.033 menos que en las mismas fechas de 2022, aunque únicamente disminuyen los leves por un descenso de más de un 81% de los del sector de actividades sanitarias y servicios sociales asociados al Covid (-1.977), que acaparan el 97% de la reducción general de la siniestralidad más leve.

Por el contrario, UGT-Salud Laboral precisa que estas estadísticas oficiales confirman este año el mayor número de accidentes laborales mortales de la serie histórica, además de 26 calificados de graves, la mayor cuantía registrada en estas fechas desde 2016.

El sindicato se reafirma en su exigencia de poner en marcha cuanto antes la recientemente aprobada Estrategia Cántabra de Seguridad y Salud en el Trabajo que completa la acordada en el diálogo social nacional y de «situar la salud laboral como objetivo prioritario del diálogo social en Cantabria», según precisa el responsable regional de UGT-Salud Laboral, Marcos Flores.

De problema laboral a problema social

«Es un problema de origen laboral que ha trascendido a un problema social y que obliga a medidas de choque que paren las estadísticas tan inaceptables que tenemos» subraya Flores, que recuerda que «venimos denunciando desde hace tiempo que la accidentalidad en los centros de trabajo no deja de crecer en los últimos 10 años desde que se inició la recuperación económica en Cantabria y especialmente la más grave y mortal».

«Es más necesario que nunca recuperar esa cultura preventiva en los centros de trabajo que redujo al máximo la siniestralidad laboral en los primeros años de la Ley de Prevención de Riesgos Laborales y que las entidades que intervienen en la prevención aúnen y sumen posturas», agrega el responsable regional de UGT-Salud Laboral.

Para el sindicalista, «se debe analizar en profundidad la situación de los técnicos y de los servicios de prevención, la prevención de las propias empresas y la vigilancia de la Inspección y de la Fiscalía del cumplimiento de la normativa legal».

CCOO considera las cifras «inasumibles»

Comisiones Obreras de Cantabria (CCOO) ha señalado este viernes, tras conocer las estadísticas de siniestralidad laboral del mes de junio de 2023 en Cantabria publicadas por el Instituto Cántabro de Seguridad y Salud en el Trabajo (ICASST), que las cifras de accidentes de trabajo en la comunidad siguen siendo «inasumibles».

Laura Lombilla, secretaria de Salud Laboral de CCOO de Cantabria, ha advertido que los datos revelan un total de 604 accidentes de trabajo -535 en jornada y 69 in itinere-, «y, además, tenemos que lamentar un accidente mortal, que ha acabado con la vida de otro trabajador y nos vuelve a mostrar la peor cara de la siniestralidad laboral».

Para Lombilla, «los datos de siniestralidad que observamos durante la primera mitad del 2023 dejan claro que algo se está haciendo mal en las empresas de Cantabria, a las que instamos a abordar todas las medidas necesarias para evitar accidentes laborales». En el acumulado anual, en Cantabria se han registrado 3.606 accidentes de trabajo hasta junio de 2023, nueve de ellos mortales, más del doble del año anterior, cuando se registraron cuatro.

Los accidentes de trabajo se han incrementado en junio un 2,03% respecto al mes anterior y, en términos interanuales, ha habido un descenso del 40,14%. En este sentido, Lombilla ha subrayado que esta reducción respecto a junio de 2022 responde a la fuerte influencia de las bajas COVID en aquel momento». De hecho, como ha advertido, «aunque de forma global el número de accidentes haya descendido, vemos con mucha preocupación cómo los accidentes graves y mortales cada vez son más frecuentes y alcanzan cifras insoportables».

La secretaria de Salud Laboral de CCOO de Cantabria ha incidido en «la importancia del cumplimiento de los planes de prevención de riesgos laborales y dotar a los y las trabajadoras de la formación y herramientas necesarias para que nadie se juegue la salud y la vida en el trabajo».

Por sectores, las actividades con mayor siniestralidad durante el mes de junio han sido la industria manufacturera, con más del 20,56% de los accidentes, seguida por la construcción, con más del 15,70%.

Enfermedades profesionales

Este viernes también se han publicado los datos de enfermedades profesionales, que el ICASST da a conocer de forma trimestral y que muestran que, durante el segundo trimestre de 2023, se comunicaron en Cantabria 132 partes por enfermedad profesional, lo que supone un incremento del 3,94% con respecto a los comunicados durante el mismo periodo del año 2022 –con 127 partes-.

Por sectores, el de los servicios es el que más partes por enfermedad profesional aglutina -79-, aunque Lombilla ha subrayado que «también es el sector que más personas trabajadoras concentra y, sin embargo, los índices de incidencia muestran que la industria es el sector con más partes comunicados por cada 100.000 personas, con un total de 113 partes comunicados, 47 en el caso de los servicios».

Lombilla ha advertido que «tenemos que insistir en la infradeclaración de enfermedades profesionales, porque los datos nos hacen pensar que un número elevado de estas no son catalogadas como tal, por lo que es fundamental desarrollar la Estrategia Cántabra de Seguridad y Salud en el Trabajo para acabar con este subregistro».

Por ejemplo, en el caso del grupo VI, relacionado con los agentes carcinógenos, no se ha registrado ningún caso durante este trimestre –durante todo el 2022, solo se registró un caso en la comunidad-, «por lo que continúa la tendencia de contabilizar una cantidad ínfima de los casos de cáncer producidos por el trabajo».