Los delegados de personal de Ambuibérica por CSIF-Cantabria, sindicato más representativo en las administraciones públicas y con presencia creciente en el sector privado, informan de que, tras una asamblea celebrada ayer, los trabajadores del servicio de transporte sanitario terrestre programado del Servicio Cántabro de Salud han decidido ir la huelga para exigir una solución a los problemas de un servicio que aun no tiene adjudicada empresa.

José Alberto Ibarguen y Gildo Cabañeros, delegados de personal de Ambuibérica de CSIFCantabria, señalan que el servicio urgente de transporte sanitario de Cantabria ya ha comenzado a dar servicio como Autransa (nueva marca de Ambuibérica); sin embargo, continua sin saberse nada del concurso de ambulancias para el transporte programado.

Según explican, «a pesar de haberse reunido hasta en tres ocasiones con la Administración, el Consejero de Sanidad y el Gerente de Atención Primaria, sólo nos transmiten que no pueden hacer nada hasta que saliera el recurso que puso SSG, recurso que finalmente ha sido rechazado, y se realizara un nuevo concurso”.

En este punto, Cabañeros exige una solución para este impass entre esta reciente resolución y la salida y posterior resolución del nuevo concurso ya que “entendemos que puede ser un proceso muy largo”.

Cabañeros incide en la gravedad de un hecho que podría haberse evitado ya que ellos mismos señalaron, ante el mismo Servicio Cántabro de Salud, como inviable un presupuesto tan bajo y poco realista que motivó que concurriera única empresa, SSG, que no lo consiguió por no cumplir las condiciones del pliego, siendo excluida por parte de la mesa de contratación y dejando así el transporte programado desierto hasta próximas actuaciones.

Añaden que «mientras Sanidad asegura estar buscando soluciones en el marco de la legalidad para que no se produzcan discriminaciones laborales entre los trabajadores del sector, la realidad es que, a menos de una semana de comenzar la aplicación de las subidas salariales acordadas en marzo de este año, los trabajadores del servicio de urgencias empezarán a recibirlas en octubre, mientras que los compañeros del transporte programado, siguen sin saber cuándo se les va a aplicar dicha medida».

Esto, explican,  sitúa a los trabajadores del servicio programado en una posición de desigualdad respecto a sus compañeros del servicio de urgencias ya que, mientras los trabajadores del servicio de urgencias verán aplicada la subida salarial en la siguiente nómina, los del servicio programado se ven obligados a esperar que su servicio vuelva a salir a licitación y se resuelva favorablemente.

Esta situación, unida a las deficiencias existentes en la dotación del servicio respecto a las condiciones laborales, falta y el estado de materiales, la falta de personal, etc. ha llevado a los trabajadores del servicio programado ha decidir ir a la huelga cuya primera convocatoria está prevista para principios de octubre. Además, anuncian concentraciones frente al Gobierno de Cantabria y la Consejería de Sanidad.