Bridgestone acaba de anunciar un ERTE (Expediente de Regulación Temporal de Empleo, medidas de reducción de jornada o salarios durante un período determinado) para diciembre de 2023 y 2024, que afectaría a toda la plantilla en todas sus plantas, incluyendo la de Cantabria, en Puente San Miguel.

Un anuncio que el Sindicato Independiente de Trabajadores de Bridgestone vincula a la próxima negociación del convenio colectivo, a un intento de la empresa de presentarse en un escenario negativo con el que justificar el rechazo a mejoras laborales.

El sindicato, además, llama la atención sobre el concepto de flexibilidad que viene aplicando la multinacional de automoción japonesa, siempre en su beneficio.

Y advierten sobre los errores de cálculo y previsión que se vienen produciendo: porque lo que está pasando es que al no vender lo previsto, se encuentran con inventario por encima de lo normal, y ya había pasado el trimestre anterior.

Se ha pasado de un calendario “sobredimensionado” de jornada, con horas extra por sistema, a ahora la obligación de quedarse en casa por el ERTE que, recuerdan, tiene costes para las arcas públicas y para los bolsillos de los trabajadores.

Desde el Sindicato Independiente de Trabajadores de Bridgestone (SITB), queremos poner de manifiesto que la Empresa ha fallado estrepitosamente en unas previsiones, que ya en el primer trimestre del año se demostraron absolutamente irreales.

Las paradas de producción por flexibilidad han resultado “aún más lesivas” para los obreros de las plantas de Basauri (Bizkaia) y Puente San Miguel (Cantabria), donde el número de días de cierre constatados para todo el año es ya de 31 (20 por trabajador) el máximo que permite el convenio, lo que ha supuesto una pérdida del 50 % del salario diario.

Y suman otra paradoja: pese al descenso de ventas, pese al aumento de stock, pese al anuncio de ERTEs, pese a las horas extras previas, los últimos datos tanto de Bridgestone Hispania Manufacturing SL como de su matriz Bridgestone Corporation han duplicado sus beneficios, y hace apenas unos días, se publicó que esos importantes beneficios se han mantenido en el tercer trimestre del año, no teniendo prevista la multinacional cambio alguno en su pronóstico financiero para el resto del año, en el que calcula alcanzará un beneficio neto de 2.069 millones de euros.

En concreto, el grupo anunciaba esta misma semana su balance de resultados correspondientes al tercer trimestre, con un beneficio neto de 1.643 millones de euros (un 22,3% de incremento interanual) tras aumentar un 7,4% sus ventas hasta 19.780 millones.

De cara al cierre de año, Bridgestone mantiene sus previsiones: alcanzar unos ingresos próximos a 25.400 millones de euros y lograr un beneficio neto atribuido de 2.069 millones de euros, a la vez que su beneficio operativo se disparó un 22,3% hasta unos 2.324 millones de euros.

LOS TRABAJADORES DE BSH SE CONCENTRARÁN EL DÍA 20 PARA EVITAR EL ERE

Los trabajadores de BSH Electrodomésticos se concentrarán el día 20 a las puertas de la fábrica, con paros de 13.00 a 15.00 horas, para que la empresa escuche su reivindicación y negocie un ERTE en 2024, y no un ERE con 59 despidos como plantea, es decir, para que los despidos se conviertan en medidas temporales de reducción salarial o de jornada.

Así lo han acordado este sábado en una asamblea, en la que el comité de empresa ha explicado a los trabajadores la memoria técnica presentada por la dirección, en la segunda reunión del periodo de consultas de 30 días acerca del Expediente de Regulación de Empleo (ERE).

El comité propone que en 2024 se siga aplicando el ERTE de producción, que está en vigor desde 2022, y no el ERE que propone la dirección con 59 despidos, dado que son «productivos y rentables».

Por su parte, la dirección sostiene que la medida del ERTE, puesta en marcha desde la invasión de Rusia en Ucrania, «se ha agotado» y necesita aplicar un ERE porque las producciones «no acompañan a la plantilla».

De esta forma, el comité ha pedido el apoyo a la plantilla, formada por 340 empleados, de cara a las próximas reuniones con la dirección, previstas para el miércoles y jueves de esta semana.
Asimismo, los trabajadores han apoyado la propuesta de desarrollar el próximo día 20 un paro de 13.00 a 14.00 horas, para los turnos de mañana, y otro de 14.00 a 15.00 horas, para los de tarde.
También se han mostrados partidarios de llevar a cabo más movilizaciones «hasta que la empresa escuche la reivindicación del comité», que a día de hoy es que negocie un ERTE en el año 2024.

Así, el comité va a tramitar ahora la documentación ante Trabajo, el Ayuntamiento de Santander y el Orecla para registrar la concentración y poder parar una hora en cada turno ese día en medida de protesta.

El ERE propuesto por la empresa contempla el despido de un total de 59 trabajadores, con 40 salidas a principios de enero, mientras que las otras 19 se llevarían a cabo hasta 2028.

Por su parte, el comité defiende que, según las propias previsiones de BSH, la fábrica de Santander puede terminar el año «siendo económicamente productiva».