Comisiones Obreras de Cantabria (CCOO) ha dado una vez más la voz de alarma al conocer los datos de la siniestralidad laboral del mes de octubre, cuando se registraron 567 accidentes de trabajo con baja (501 durante el transcurso de la jornada y 66 in itinere), lo que supone un 5,59% más que en el mes de septiembre. Unas altas cotas de siniestralidad laboral que para el sindicato es imprescindible reducir con una apuesta firme y decidida por la prevención de riesgos laborales.

Además, el sindicato ha subrayado que los datos del Instituto Cántabro de Seguridad y Salud en el Trabajo dejan un mal sabor de boca pues ha habido que lamentar una nueva víctima mortal, que eleva a 13 el número de personas fallecidas en su puesto de trabajo o mientras iba o venía de él en lo que va de año, que son 5 más que en el mismo periodo del año anterior.

Desde CCOO se ha destacado también que sigue imparable el crecimiento de los accidentes en itinere, siendo 14 más que en el mes de octubre del año pasado, con lo que la variación anual fue del 26,92% y, aunque parece que en el número total de accidentes ha habido un descenso, los datos se desvirtúan por las bajas COVID de 2022.

Laura Lombilla, secretaria de Salud Laboral de CCOO de Cantabria, ha señalado que «es muy preocupante este significativo ascenso de los accidentes in itinere, que siguen una escalada abrumadora y que dan buena cuenta que la siniestralidad está creciendo. Esta año que ya no hay bajas COVID es normal que bajen los datos de los accidentes durante la jornada pero lo cierto es que las cifras no se corresponden con la realidad y siguen siendo inasumibles».

Para Lombilla, «es muy importante que se cumplan los planes de prevención y que las personas trabajadoras tengan acceso a la formación y a las herramientas necesarias para proteger su integridad pero todo esto es responsabilidad de las empresas y, por tanto, a ellas apelamos para que sean conscientes de su importancia. El incremento de accidentes de trabajo con respecto a septiembre es un claro ejemplo de que las políticas preventivas no están siendo eficaces para proteger».

En el acumulado anual ya se han registrado en Cantabria 5.960 accidentes de trabajo (5.289 durante la jornada laboral y 671 in itinere) y, lo que es peor, aunque hay menos accidentes que en el mismo periodo del año anterior, los que hay son más graves, con 13 personas que han perdido la vida durante su jornada laboral desde el mes de enero.

Respecto a los sectores de actividad con más accidentes laborales registrados, la industria manufacturera fue el sector con más bajas durante la jornada y alcanza el 20,16% del total y le siguen la construcción, con el 15,57%.

«La incidencia de los accidentes de trabajo ocurridos durante la jornada laboral sitúa la media en 249 por cada 100.000 personas trabajadoras, una incidencia muy alta. Desde CCOO vamos a seguir poniendo toda nuestra atención en que las personas trabajadoras no pongan en riesgo su vida en el desempeño de su actividad laboral», ha concluido Lombilla.

El comité de empresa de BSH Electrodomésticos y la dirección de la compañía mantienen su desacuerdo sobre el número de despidos planteados en la fábrica de Santander y las indemnizaciones económicas a aplicar, tras haber concluido hoy la segunda ronda de negociaciones que se reanudarán este lunes 27 de noviembre.

Según comentó el presidente del comité de empresa de la planta productiva santanderina de BSH, Carlos Romero (UGT-FICA), «se han acercado las posturas pero seguimos en total desacuerdo sobre el número de despidos, pese a que la empresa los ha rebajado a 38 (inicialmente eran 59), 23 para enero de 2024 y otros 15 para enero de 2025».

«El comité ha incrementado su oferta a un máximo de 18 despidos, 13 el próximo mes de enero y 5 en las mismas fechas de 2025, por lo que las diferencias con la empresa siguen estando ahí, además de nuestro rechazo a unas indemnizaciones muy bajas», agregó el sindicalista.

Romero aclaró al respecto que la empresa ofrece una indemnización por despido de 37 días en el tramo previo a la reforma laboral y de 29 para el período posterior con un tope de 19 mensualidades, lo que para el comité «es del todo insuficiente».

El presidente del comité de empresa de BSH en Santander matizó que «seguimos planteando un ERTE de 40 días con un 65% de la base reguladora, permiso y vacaciones pero con un máximo de 18 despidos y con indemnizaciones de 34 días en el tramo hasta la reforma laboral y de 33 días para después con un tope de 22 mensualidades».