En la tarde de ayer se produjo el desplome de una parte de la cubierta de la zona de los vestuarios del Pabellón de Escobedo.

Los dos trabajadores de las empresas que estaban ejecutando las obras de encofrado y hormigonado del tejado de los vestuarios y que resultaron heridos han sido dados de alta.

Los técnicos municipales trabajan desde ayer para contar a la mayor brevedad con informes que permitan esclarecer las causas de este accidente laboral, provocado por el colapso del forjado del techado de los nuevos vestuarios.

Los responsables técnicos que durante la jornada de ayer y hoy han estado comprobando el estado de la obra en coordinación con la empresa adjudicataria determinaron la necesidad de derribar el resto de la estructura que se había visto dañada tras el colapso. Estas labores ya han sido llevadas a cabo en el día de hoy para garantizar la seguridad y la viabilidad de las obras una vez se vuelvan a retomar.

El alcalde de Camargo, Diego Movellán, se ha puesto a disposición de las familias de los trabajadores heridos a quienes ha contactado para interesarse personalmente por su estado.

Movellán asegura que “es momento ahora de encontrar el origen de este accidente” y ha afirmado que “lo más importante es que no se hayan producido daños personales de mayor gravedad”.

El Ayuntamiento de Camargo sacó a licitación el contrato para la ejecución de nueva cubierta y vestuarios del Pabellón de Escobedo por 967.284 euros, y un plazo de ejecución de seis meses, por segunda vez en abril de 2023 tras quedar desierta la primera licitación.

Finalmente los trabajos se adjudicaron el ocho de junio de 2023 a la empresa RUCECAN (una de las que aparecían de forma más activa en las grabaciones del exdirector de Carreteras de la Consejería de Obras Públicas por adjudicaciones en ese departamento) por un importe de 653.992 euros más IVA y un plazo de ejecución de cinco meses.