La Fundación Franz Weber ha advertido del negacionismo existente en el Gobierno de Cantabria por mantener la partida presupuestaria de 50.000€ para promover corridas de toros en municipios rurales de la comunidad con la excusa de la despoblación.

Después de la actividad realizada en el término municipal de Pesaguero y sin que el ejecutivo haya aclarado el apoyo real a dicha convocatoria, los naturalistas advierten que este dinero es una subvención directa sin ningún tipo de peso científico, por lo que se apoya únicamente en el deseo de subvencionar tauromaquia.

La mayor parte de eventos taurinos realizados el pasado año parten de una única empresa, que tendría relación con el propio Partido Popular. El gerente y administrador único de esta compañía es actualmente concejal de esta formación en Tudanca y podría ser uno de los principales beneficiarios de estas nuevas ayudas autonómicas.

FFW recuerda que no existe ningún informe ni estrategia pública solvente que relacione la organización de eventos taurinos con la fijación de población en entornos rurales. Es más, la última corrida realizada en Pesaguero evidenció un descenso del número de asistentes con respecto a 2023 a pesar de la ingente campaña de publicidad en toda Cantabria.

La agenda del Gobierno: Reunirse con peñas taurinas.

Los naturalistas han criticado también que el Gobierno cántabro promueva estas subvenciones directas al lobby taurino mientras se reúne con peñas taurinas, cuya representatividad en el conjunto de la ciudadanía es ínfima.

Estos grupúsculos han llegado a reclamar a Isabel Urrutia, consejera de Presidencia, dinero para organizar unas jornadas taurinas en Santander, aunque no existan causas de interés público que justifiquen cualquier desembolso de dinero público.