El Servicio Europeo de Cambio Climático de Copernicus ha publicado el Informe sobre el Estado del Clima en Europa 2023, junto con la Organización Meteorológica Mundial (OMM) de las Naciones Unidas, que confirma la alarmante tendencia de los impactos del cambio climático en nuestro continente durante el pasado año.

Javier Díez Sierra, miembro del Instituto de Física de Cantabria y del grupo ‘Clima y Ciencia de Datos’, encargados de este estudio y que lleva más de 15 años analizando información para hacer proyecciones del clima ha estado explicando los detalles de su labor en la sección ‘La energía del Cambio’ que el Faradio ofrece junto a Solabria todos los viernes.

“Nuestro trabajo es el análisis de modelos climáticos globales, que son numéricos y matemáticos, iguales que los que vemos en la tele en la predicción del tiempo, pero un poco más complejos. A estos modelos les aplicamos los diferentes escenarios de contaminación, ya que no sabemos cuánto va a contaminar el ser humano en el futuro, pero sí sabemos que puede haber diferentes escenarios”, relata Díez, que pone como ejemplo un “posible escenario de alta contaminación y otro con medidas de mitigación, y en función de esos resultados tenemos varios posibles mundos. Así analizamos cómo será el clima para esos posibles mundos”.

A finales del año pasado han contribuido al Atlas Interactivo del Panel Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC), y Díez señala que ha sido un trabajo de muchos años en el que han liderado los capítulos del primer paquete de trabajo, que es “ver cómo va a cambiar la temperatura”, y han añadido al Atlas la herramienta de convertirse en interactivo, porque los anteriores aportaban un atlas con imágenes en PDF. “En este caso hemos desarrollado una App en la que cualquier persona puede buscar y analizar cómo va a ser el clima a escala global o regional con diferentes variables”, indica el investigador.

A través de este Atlas han podido saber cuáles son los efectos que está teniendo el cambio climático en Cantabria. “La temperatura está aumentando en todo el mundo, lo que pasa es que ese aumento es heterogéneo, lo que significa que en las regiones polares aumentará más la temperatura. En España estamos en un punto caliente porque el aumento de la temperatura está provocando cambios significativos en los regímenes de precipitación”, destaca Díez, que añade en el caso de Cantabria como han detectado “dos zonas en las que van a descender las precipitaciones: Liébana y Campoo, con una tendencia a un clima mediterráneo”.

“Por otro lado, el aumento del nivel del mar hace que haya más riesgos de inundación en las zonas costeras, y en las zonas continentales también la precipitación está siendo más extrema, por lo que el hecho de que haya más calor y más energía en la atmósfera hace que haya más probabilidad de lluvias torrenciales que lleven a inundaciones”, añade Javier.

Una preocupación directamente ligada a la temperatura y que se provoca cada vez más son los incendios forestales, ante lo que Díez opina que “la mayoría de los incendios en Cantabria son provocados pero está claro que el hecho de que la atmósfera contenga menos humedad y que haya más temperatura hace que los incendios cada vez sean más grandes y que tengan un mayor impacto en el medio natural”.

Por otro lado, en la declaración de clausura de la COP 28, el Secretario General Antonio Guterres afirmaba que la ciencia pide limitar el calentamiento global a 1,5 grados, una cifra que hemos alcanzado. “Cuando hablamos de clima hablamos de un periodo de entre 20 y 30 años, aún no hemos pasado esa cifra durante varios años, sino que la hemos pasado en un momento concreto. Ahora estamos en el 1,4 aproximadamente, y para no superarlo deberíamos dejar de emitir desde ya y en 2050 haber hecho una transición ecológica a nivel global, algo que es complicado, aunque hay que marcarse esa meta y ser optimistas”, anima Díez.

INFORME COPERNICUS

“Ahora mismo estamos extendiendo el Atlas dentro del marco de Copernicus para darle muchas más funcionalidades y más servicios climáticos para la gente. En nuestro grupo de ‘Clima y Ciencia de Datos’ estamos explorando mucho cómo utilizar la Inteligencia Artificial para obtener resultados con mucho menor coste”, explica el investigador.

José Manuel Gutiérrez ha trabajado también en el desarrollo del Atlas
Interactivo de Copernicus

Otro de los investigadores del grupo, José Manuel Gutiérrez, ha comentado el informe de Copernicus sobre el estado del clima. Según el informe, Europa experimentó en 2023 su año más cálido jamás registrado, lo que provocó olas de calor, sequías e inundaciones, todo agravado por el fenómeno de El Niño. “Este ha sido el año más cálido desde que hay registro histórico en el globo, no solo en promedio de todo el año, sino en muchos meses, en concreto los meses de verano, donde hemos superado el grado y medio, respecto a la época preindustrial, que es el umbral de calentamiento que se establece como cota en los Acuerdos de París”, explica el investigador.

“Deberíamos no calentarnos por encima de ese nivel si queremos evitar cambios drásticos en el clima. Que entremos ya en ese escenario empieza a ser preocupante”, afirma.

Según los resultados de Copernicus, “ha sido especialmente anómala la temperatura que experimentamos los humanos en la superficie de la tierra, pero también ha sido muy anómala la temperatura del océano, se ha calentado casi 1 grado por encima de lo que es la media, y eso es mucho, si nos imaginamos calentar una bañera 1 grado de temperatura, eso requiere una energía considerable, pues imaginemos todo el océano”, sostiene Gutiérrez.