Organizaciones ambientales advierten de que la aprobación de instrumentos de gestión y protección son «la única garantía» para que el turismo no ponga la naturaleza «en riesgo»
Con motivo de la celebración este 22 de mayo del Dia Mundial de la Biodiversidad, las entidades conservacionistas ARCA, Ecologistas en Acción, SEO/BirdLife, Red Cambera y Verdes Equo recuerdan al gobierno de Cantabria que las especies protegidas de Cantabria sólo cuentan con dos planes de conservación vigente, que están pendientes de aprobación al menos tres áreas de interés natural (ANEIs) y la tramitación del Plan de Ordenación de los Recursos Naturales de la Montaña Oriental Costera.
En este sentido, destacan que el Gobierno de Cantabria acumula importantes incumplimientos de plazos en lo que respecta a la elaboración y aprobación de planes de recuperación y conservación de especies amenazadas y de espacios naturales.
Tal y como detallan, la Ley 42/2007 de Patrimonio Natural y de Biodiversidad establece con carácter básico las obligaciones y plazos para la catalogación de especies, por lo que la normativa autonómica, en este caso la Ley de Cantabria 4/2006, de 19 de mayo, de Conservación de la Naturaleza de Cantabria solo puede añadir obligaciones adicionales a las ya recogidas en la legislación básica en materia de conservación de especies.
En cuanto a las especies de fauna, sólo el oso pardo y el urogallo cantábrico cuentan con un plan de recuperación, aunque en el caso del oso pardo en fase de actualización, Tres especies de aves tienen redactados sus planes, pero sin aprobación definitiva, caso del paíño europeo, el cormorán moñudo y la perdiz pardilla. Y haría falta con urgencia tramitar los planes de conservación del alimoche, el águila real, los aguiluchos pálido y cenizo, y el quebrantahuesos.
En cuanto a los espacios naturales, al menos tres Áreas de Interés Natural siguen a la espera de su declaración definitiva, en concreto las Marismas de Astillero, la ría de San Martín en la desembocadura del Saja-Besaya, y el Monte Tejea en Valle de Villaverde. Sin olvidar la puesta en marcha de la redacción del Plan de Ordenación de los Recursos Naturales de la Montaña Oriental Costera, anunciada en el año 2018.
Quedaría pendiente también determinar la figura de protección de Peña Cabarga, espacio natural anulado en su momento por los tribunales por no haberse desarrollado la normativa de protección.
Impulso a los Monumentos Naturales
Las organizaciones ecologistas quieren recordar que la Ley de la conservación de la naturaleza de Cantabria establece en su artículo 12 la figura de Monumentos Naturales para aquellos espacios o elementos de la naturaleza de notoria singularidad, rareza o belleza que merecen ser objeto de una protección especial.
En este sentido animan al Gobierno de Cantabria a preparar una propuesta de nuevos espacios en Cantabria que puedan constituirse en Monumento Natural, ya que solo existe un espacio que cuente con esta figura: las Secuoyas de Cabezón de la Sal.
Por un turismo responsable con la naturaleza
Por último, las organizaciones ecologistas quieren resaltar que la naturaleza de Cantabria es uno de los activos más importantes que atrae cada día más visitantes a nuestra comunidad, y por ello, contar con los instrumentos de gestión y protección de espacios y especies «es la única garantía para lograr un turismo responsable con la naturaleza que no la ponga en riesgo».
Pero, lamentan, «desgraciadamente son muchos los ejemplos de cómo la masificación y la falta de gestión está amenazando a espacios y especies protegidas». «Proteger y conservar la biodiversidad es una obligación legal, pero la inacción del Gobierno está también poniendo en riesgo el patrimonio y la riqueza natural de la región, precisamente el activo principal de la imagen y atractivo de Cantabria», concluyen.