Personaje televisivo conocido desde hace décadas, Javier Nart decidió ligarse al partido de Ciudadanos, con el que concurre por tercera vez a unas elecciones europeas. Ya tiene la experiencia de 10 años como eurodiputado, y eso le hace pensar en la importancia que tiene la UE como cuerpo político que incluye las pulsiones de 27 países.

«Europa es una necesidad para no convertirnos en un parque temático gastronómico y cultural, con puntos muy anecdóticos industriales», dice en  una entrevista concedida a EL FARADIO DE LA MAÑANA, en Arco FM.

Económicamente hay un polo enormemente fuerte como es China, y Nart piensa que convierte a la UE en algo con cierta irrelevancia, porque no marca el ritmo, sino que se acostumbra a ir a rebufo.

Pero entre los temas a tratar en las Elecciones Europeas está la defensa y la seguridad. Más de dos años de guerra en Ucrania, la masacre en Gaza de los últimos siete meses, pero también destaca la situación del Sahel, donde la UE también cae en la irrelevancia. Pero advierte de que la seguridad de esos otros lugares también es la nuestra.

Las respuestas necesarias, según él, no se pueden plantear desde la exigencia de los partidos de ultraderecha de reforzar la identidad nacional, porque cree que no conviene pensar en defender otro territorio con los ejércitos de cada país. Estar en un mismo club debería suponer hacer cosas en común y con recursos comunes.

La pandemia y la guerra de Ucrania son, quizá, los dos hechos más trascendentales de los últimos años, y son hechos que animan a Nart a reflexionar sobre reindustrializar el continente antes de que sea demasiado tarde.

También habla el eurodiputado de cómo funciona el juego político en Europa, en comparación con España. Subraya la diferencia en que en el Parlamento Europeo no se hace el espectáculo que estamos acostumbrados a ver por aquí. «No hay incidentes, se trabaja», afirma. Y califica de espectáculo lo que se hacen en la política estatal porque «el 80% de lo que pasa en los países de la UE son decisiones europeas». Es decir, por mucho que cada Gobierno presuma de las cosas que hace, muchas ni siquiera son por su propio mérito.

Por eso definir con palabras grandilocuentes lo que suponen estas elecciones, pero desde una perspectiva equivocada, es otra forma de exagerar que puede desilusionar las expectativas de un buen puñado de votantes. Destaca precisamente Nart que la forma de trabajar del grupo popular y el grupo socialista, además del grupo liberal (en el que está Ciudadanos), no tiene nada que ver en Europa con lo que sucede en España.