“Quería que mi mundo fotográfico estuviese en otra parte, que se pareciese mucho más al mundo de la poesía íntima que al del relato social”, afirma Carlos Cánovas, autor de la fotografía ‘Like a prostitute’ que enciende este jueves el escaparate de La Caverna de la Luz, en la Calle del Sol.

ESCRIBE JAVIER VILA SOBRE LA IMAGEN

Se trata de un paisaje urbano en el que confluyen, por un lado, la naturaleza y, por otro lado, la intervención del hombre. Una imagen estática y reflexiva en la que los protagonistas son el espacio, la distancia y el tiempo, con una fuerte dimensión poética.

Pero esta esquina, casualmente es en Santander, un vetusto hotel del que ya nadie se acuerda, el Hotel Rex, levantado durante la reconstrucción del centro de la ciudad, posterior al incendio de 1941, en un solar cedido a constructores madrileños afines al régimen y que, a finales del pasado siglo, fue reemplazado por oficinas y una franquicia de ropa, a la que sustituyó otra y ahora otra.

Esa intrahistoria de esta fotografía quizás no la conozca Carlos Cánovas, quizás su reflexión parta sencillamente de esa planta asomada a una ventana en una esquina.

El trabajo de Carlos Cánovas, en su conjunto, constituye una suerte de registro crítico sobre la transformación de lo urbano. Ha realizado series sobre paisajes sin retorno y esta fotografía, sin estar incluida en esas series, de alguna manera lo es.

Para mí es un paisaje de mi infancia, un lugar emocional, donde de la mano de mi madre esperaba cada noche la salida de mi padre de la farmacia cercana en la que trabajaba para regresar juntos a casa. Otro paisaje sin retorno.

CARLOS CÁNOVAS

Es un fotógrafo español además de un estudioso de la fotografía. Desde muy pequeño se trasladó a vivir a Pamplona, donde realizó estudios de peritaje mercantil.

En 1970 colaboró en su primer documental cinematográfico. Más tarde, en 1972, adquiere su primera cámara fotográfica, comenzando así su actividad fotográfica. Entre 1975 y 1980 realiza intercambios de opiniones y participa en distintos concursos fotográficos. Compagina su obra personal con una actividad docente en varios centros y universidades.

En estos años realiza trabajos de recuperación del legado fotográfico, como “ Apuntes para una historia de la fotografía en Navarra” , publicado en 1989. Además realiza monografías sobre antiguos fotógrafos como Miguel Goicoechea o Nicolás Ardanaz.

“Fotometraje , cartelismo y publicidad” es su primer artículo sobre crítica fotográfica publicado en 1984.

Centra su obra fotográfica en aspectos cotidianos. Sus primeras series más famosas son TAPIAS (1980), EXTRAMUROS (1983-1990), PAISAJE SIN RETORNO (1993-1994) y PAISAJES FURTIVOS. Dichas obras unen su universo creativo propio, construido alrededor del paisaje urbano.

En 1991 realiza la exposición “4 direcciones: fotografía contemporánea española”. Ya en 2002 lleva sus obras al Instituto Cervantes. Cuatro años más tarde, en 2006, realiza su obra “Paisaje anónimo”, centrada en la descripción de edificios antiguos.

Finalmente, cabe destacar que su obra forma parte de fondos fotográficos de la Biblioteca Nacional de Francia y del Instituto Valenciá d´Art Modern.

También cabe citar, entre sus obras más destacadas “Paisaje anónimo”, “Retornos”, “Dolientes plantas”, “Ría de hierro” o “Séptimo cielo”.

Es el primer fotógrafo que logra el premio Príncipe de Viana de la Cultura. Distingue no sólo su trayectoria artística y profesional, sino también su labor formativa y de divulgación en torno a una actividad en la que ha conseguido el reconocimiento unánime.