La asociación ‘Cantabria contra la tauromaquia’ convoca concentración el próximo 25 de julio
Desde el colectivo ‘Cantabria contra la tauromaquia’ quieren visibilizar y denunciar un año más cómo las fiestas de distintos territorios de Cantabria en general, y Santander en particular, se ven manchadas de sangre debido a los actos taurinos que se programan.
Este año están teniendo constancia de actos de tortura en un número de ubicaciones considerablemente mayor al del año pasado y sustancialmente superior al de otros años, «en una clara ofensiva reaccionaria de algunas instituciones gubernamentales de Cantabria por mantener la tauromaquia con respiración asistida, en forma de subvenciones y fondos de dinero público», dicen en el comunicado que han publicado.
En concreto, en marzo tuvo lugar una corrida de toros en Pesaguero (comarca de Liébana), en mayo otra en Rionansa y recientemente, el último fin de semana de junio, tuvieron lugar una corrida y una novillada en Requejo (Campoo de Enmedio). Este fin de semana, en Treceño, tendrá lugar una suelta de toros y corrida y entraremos en la Semana Grande de Santander con siete eventos taurinos.
A partir de aquí, la agenda cuenta con más eventos en agosto en La Edilla (Rasines), en Bárcena de Pie de Concha y en Polaciones. Ya al final del verano, también habrá eventos taurinos en septiembre en Molledo (con cuatro encierros de vaquillas, uno de ellos infantil), en Ampuero (tres encierros) y una corrida de toros en Santoña.
El caso de Santander
«El epicentro de todo este bochorno, las torturas que tendrán lugar una vez más durante las fiestas de Santander, es también el mayor ejemplo de que además del fomento de un indignante maltrato animal, son un claro caso de injustificable y opaco derroche de dinero público», afirman. En este sentido, de lo que tienen datos es, en línea con los gastos que año a año se destinan a la tauromaquia, del informe de liquidación del presupuesto de 2023 del Ayuntamiento de Santander, donde se especifica el gasto de 300.000 euros en la rehabilitación de la plaza de toros de Santander.
Por otro lado, se apreciaba un ingreso a la “S.A. de la Plaza de Toros” de 35.000 €, dentro de la categoría ‘Otras subvenciones a públicos y sociedades mercantiles’. Al mismo tiempo, mirando la aprobación de los Presupuestos de 2024, en el apartado de “Sociedad Municipal Plaza de Toros de Santander, S.A.” se aprecian, por un lado, gastos de 35.675 € (personal) y 64.030 € (bienes y servicios), haciendo un total de 99.705 €. Por otro lado, en cuanto a ingresos, 68.705 € (en tasas y otros ingresos, los cuales entendemos que viene a ser el alquiler de la Plaza) y un gasto de 35.000 € en lo que se denomina ‘transferencias corrientes’. Con ese último ingreso, el balance anual sale con un saldo positivo de 4.000 euros. Sin él, estaríamos hablando de pérdidas de 31.000 €. Y se preguntan de dónde sale ese dinero, que ya se aprecia en otros años precedentes.
Por ejemplo, en la aprobación de Presupuestos de 2021, las otras cifras de gastos e ingresos varían ligeramente, pero esos 35.000 euros se mantienen, dando con ello de nuevo un saldo positivo de 5.000. Sin él, hablaríamos de pérdidas de 30.000. En este contexto, a pesar de la opacidad por parte del Ayuntamiento, destacan una declaración del exconcejal Miguel Saro, de Izquierda Unida, en un Pleno de 2022, que confirmaría la procedencia de ese dinero: “Santander es una de las pocas Administraciones que ha mantenido las inyecciones financieras sin límite para garantizar la pervivencia de la tauromaquia en nuestro municipio. No ha ayudado a su supervivencia económica el hecho de que históricamente la Alcaldía se haya reservado en torno a mil abonos anuales de la Feria de Santiago como regalos para agasajar a cientos de personas y colectivos de la ciudad, una herramienta muy útil para asegurar la buena salud de redes clientelares. En mayo de 2016 el Pleno del Ayuntamiento acordó no subvencionar en adelante la feria taurina de la ciudad, acuerdo que no ha tenido reflejo en las cuentas municipales hasta este año, habiendo recibido la sociedad pública Plaza de Toros una subvención de al menos 100.000 euros para asegurar su equilibrio presupuestario, que en los últimos dos años se ha reducido a 50.000 y 35.000 euros. Este ejercicio presupuestario se va a desarrollar por primera vez la Feria de Santiago a través de un contrato de arrendamiento con tercero, con la empresa Lances del futuro, S.L., que podrá ser prorrogado por las partes dos años más, en el que el Ayuntamiento se reserva gratuitamente 325 abonos, palcos institucionales, ocho barreras y cuatro contrabarreras.”
El hecho de inyectar desproporcionadas subvenciones a esta empresa apunta a ser la explicación de probables pagos indirectos con dinero público a hechos como los autobuses que se fletaron de Gijón a Santander en 2021, gratuitamente, para asistentes a los actos taurinos en Santander, dice ‘Cantabria contra la tauromaquia’.
Oficialmente, estos gastos han corrido a cuenta de la empresa que gestiona desde 2020 estos eventos taurinos, Lances de Futuro S.L. Sin embargo, estas grandes cantidades de fondos públicos que vienen percibiendo, además de servir para ocultar un déficit presupuestario del Ayuntamiento, es probable que sirvan para sufragar este tipo de gastos de manera indirecta, sostiene la asociación, que añade una información de 2016 hablaba de aportaciones en ese año y el siguiente que evitarían la desaparición de la sociedad.
Además, hablan de un derroche de dinero público que va mucho más allá, con ejemplos como la polémica Escuela Taurina que se inauguró en 2021, o los enormes gastos propagandísticos que se vienen realizando en los últimos años, tanto a nivel publicitario por Santander, como con los desplazamientos de la Alcaldesa a distintas ciudades, destacando en enero de este año su presencia, junto a José María Garzón, empresario de Lances de Futuro S.L., en la Feria Internacional de Turismo (FITUR) de Madrid. Sin ir más lejos, esta misma semana, la alcaldesa de Santander ha presentado la feria de este año en la Casa de Cantabria de Madrid.
Gestión y cifras de la feria
El comunicado también señala la trayectoria de Lances del Futuro S.L., que es la empresa que tiene la concesión de la Plaza de Toros desde 2020 hasta 2024. Es una entidad sevillana, la cual se constituyó el 19 de octubre de 2006, gestiona las Plazas de Santander, Córdoba y Málaga, pero ha llegado a gestionar en distintos momentos hasta un total de 27 plazas de todo el Estado. Es destacable que las únicas que se ubican al norte de Madrid fueron Zaragoza, Valladolid, y de ahí hacia más el norte, encontramos únicamente la de Santander.
La asociación se pregunta cuánto cobran los toreros que acuden a la Feria de Santiago, y señalan la opacidad y lo complicado que resulta validar las cifras de impacto que tiene este evento en la ciudad, que se llegan a establecer en los siete millones de euros, y se cita algún estudio de la Universidad de Cantabria, pero no se clarifica cómo se llega hasta esa cifra.
‘Cantabria contra la tauromaquia’ decidió preguntar a una aplicación de Inteligencia Artificial por este estudio y la respuesta fue esta: “Lamentablemente, no he podido encontrar información específica sobre un estudio científico realizado por la Universidad de Cantabria que respalde directamente la afirmación de la alcaldesa de Santander, Gema Igual, sobre el impacto económico de 7,2 millones de euros de la Feria Taurina de Santiago en la ciudad.”
En el seguimiento que han hecho por Internet para ver el respaldo de ese impacto en la ciudad, sí que encontraron un artículo que a su vez hacía alusión a un informe publicado en un blog taurino, y que apuntaba a que “Ferias como Albacete o Santander suponen 8,5 millones € para la economía local”. Para ello, en el informe presentan una tabla con supuestos datos del año 2010. En ella, ese año relatan que hubo 10 corridas de toros, con una asistencia total de 70.000 personas, lo que habría implicado recaudar 3,5 millones de euros de beneficio de taquilla, y de impactos totales cerca de 8,5 millones de euros, contando los efectos indirectos (restauración, transporte y hospedaje) y lo que denominaban “efectos inducidos” descritos como “repercusiones sobre la economía local derivadas del incremento de la demanda que provoca el evento”. Se nos aclaraba también que “sin entrar aquí en detalles técnicos, los efectos multiplicadores se pueden deducir de las Tablas Input-Output elaboradas por el Instituto Nacional de Estadística. En particular, de la denominada matriz inversa de Leontief, cuyos coeficientes técnicos se suman por columnas para así obtener los multiplicadores de la producción de los sectores implicados.”
De entrada, todo este análisis, como toda simulación usando datos indirectos o asumiendo factores de conversión, es una simplificación muy grande de la realidad, dicen en su comunicado, con grandes márgenes de error que pueden darse, los cuales, además, es fácil que puedan condicionarse para que lleven a los resultados que se quieren obtener. Cuando se afirman rotundamente resultados como se hace en este informe, sin hacer una autocrítica con las limitaciones de la metodología empleada, la transparencia y objetividad de dichos resultados es, como mínimo cuestionable y dudosa, concluyen. A partir de aquí, entrando a analizar los datos de eventos y asistencia que se contabilizan, se habla que tuvieron lugar diez eventos durante la Semana Grande, entre los cuales “se han contabilizado únicamente las corridas de toros y de rejones incluidas en cada feria”. Mirando al cartel del año 2010, efectivamente fueron diez eventos, pero al menos uno era una novillada con lo que de entrada se ha contabilizado de más, analizan.
Entonces toca irse a las fuentes para ver si efectivamente hubo 70.000 espectadores en aquella edición. La asociación dice que, si nos vamos a las fuentes de información que vienen al final de ese artículo (entre las que es llamativo que algunas son otras entradas de blogs y alguna noticia de algún periódico, que a su vez no cita fuentes en los datos que presenta), en primer lugar, es destacable que, salvo tres de las fuentes, todas las demás son de 2009 o antes, por lo que los datos usados (del año 2010) no pueden provenir de ahí. De las tres fuentes del 2010 o mayores, dos de ellas eran fuentes específicas de Andalucía, y, por tanto, solo una de un blog llamado ‘toroaficion’ podía encajar como fuente. Al buscar esa referencia, el blog en cuestión resulta que no existe en la actualidad. Por tanto, al menos por la información citada en ese informe, no hay forma de hacer rastreo alguno a esos datos.
Rechazo social
Por todo ello, la asociación estima que el dinero público es base fundamental para el mantenimiento de las corridas de toros, y también que generan cada vez más rechazo social. Según datos estadísticos de AVATMA, la Asociación de Veterinarios Abolicionistas de la Tauromaquia, facilitados por el Ministerio de Cultura en 2019, los festejos taurinos han venido cayendo en un 73.4% desde el año 2007. Por otro lado, el 77.5% de los festejos taurinos se concentran en tan solo cuatro comunidades autónomas (Andalucía, Castilla y León, Castilla la Mancha y la Comunidad de Madrid).
Además, el 78% de las personas residentes en el estado están en contra de las subvenciones a la tauromaquia, subvenciones que pueden provenir de la Política Agraria Común (la PAC), del Ministerio de Cultura, del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, de las Diputaciones y también de los Ayuntamientos. «Por tanto, estos actos de tortura siguen vivos porque algunas instituciones se empeñan en seguir subvencionándolos, como vemos año a año con el bochornoso caso del Ayuntamiento de Santander».
Se refieren también a un artículo de El Diario Montañés del pasado 4 de julio en el que relatan “una noche de acampada y colas por un abono en la Feria de Santiago”. En datos de 2016 divulgados en diversos medios de comunicación, entre la juventud, el 84% de las personas jóvenes no se sienten orgullosas de vivir en un país donde las corridas de toros son una tradición. Estas colas de “decenas de aficionados” buscaban comprar el denominado Abono Joven, el cual, en datos de 2022, era de 47 euros para toda la semana de actos taurinos. La asociación se pregunta quién paga la diferencia respecto al precio normal del abono para la feria, si toreros, ganaderías, empresa gestora o las subvenciones del Ayuntamiento.
En respuesta a la campaña de eventos taurinos en Cantabria, la asociación hace un llamamiento a la sociedad cántabra a reaccionar mostrando un rotundo rechazo. «Vamos a seguir denunciando estos vergonzosos actos y convocando movilizaciones para que seamos cada vez más personas concienciadas y activas contra la tauromaquia en Cantabria». Por ello, animan a estar atentas a las movilizaciones que se irán convocando en los próximos meses. En este sentido, piden asistencia a la concentración que convocan para el próximo jueves 25 de julio a partir de las 17:30 h. frente a la Plaza de Toros de Santander.