«Ojalá el ritual de traer a los niños saharauis deje de repetirse y el conflicto se resuelva de forma favorable»
El presidente de la Asociación Cantabria por el Sáhara, Gabriel Herrería, ha sido entrevistado en el programa el FARADIO DE LA MAÑANA, donde ha hablado del programa Vacaciones en Paz, que ha permitido un año más a niños saharauis disfrutar de un verano en Cantabria con familias de acogida y el centro IES La Granja en Heras, donde se quedan los 16 niños con discapacidad que han venido este año. Herrería ha destacado la importancia de esta iniciativa, que supone un alivio temporal y una ayuda a los más pequeños que viven en campos de refugiados en el Sáhara Occidental.
Cada verano, el programa se enfrenta a un frenético periodo de semanas de adaptación, cuidados, actividades y chequeos médicos. «Es un tiempo para que disfruten y de reivindicación», ha señalado el activista de Cantabria por el Sáhara. El ritual de la llegada de los menores, se repite desde 1979, con la esperanza de que algún día el conflicto se resuelva. Mientras que por un lado muchos niños son acogidos por familias de la región, aquellos niños con discapacidad, reciben una atención de la mano de la Asociación en el instituto de Heras, en Medio Cudeyo, intentando mejorar su calidad de vida, aunque alguno llegan con problemas que Herrería tacha de «irreversibles».
Por tanto, un aspecto importante del programa es la atención sanitaria. Los niños saharauis no reciben tratamientos médicos durante el año, y al llegar a la región se evalúan sus condiciones. Gabriel Herrería ha relatado casos como el de una niña que pesaba 10kg y tuvo que ser ingresada en urgencias. «Las condiciones en los campamentos hacen mella», ha dicho, mencionando que la niña, tras ser dada de alta, continúa bajo cuidados con una bomba automática por la noche.
En el ámbito político, la situación con Marruecos y el Sáhara sigue siendo complicada. «A nivel internacional, no ha habido cambios significativos», ha lamentado el responsable, que ha apelado a la responsabilidad de España sobre el territorio, aún pendiente de descolonización. A parte, la burocracia para obtener visados sigue siendo un obstáculo, incluso antes de la medida de delegar a Marruecos el Sáhara como territorio autónomo. Esta decisión han afectado negativamente el desplazamiento y los vuelos que salen desde Argelia, que cada vez son menos.
El entorno del IES La Granja ha ayudado a la adaptación, convirtiéndose en el lugar idóneo para la estancia estival de los menores. En anteriores veranos el lugar escogido era Talledo, en Castro Urdiales y el verano pasado Boó de Piélagos. Tras quedarse sin espacio, y con la colaboración con el centro profesional de Heras y la consejería de educación consiguieron poder utilizar el instituto de Heras. «El sitio es espectacular, con espacios amplios y animales», ha comentado Herrería. Además supone estar más cerca del Hospital Marqués de Valdecilla en Santander, tanto para los chequeos, como por si ocurre cualquier complicación o surge alguna alerta sanitaria.
A comienzos de Vacaciones en Paz, un problema era comunicar a los niños con sus familias. Hoy esto se encuentra a la orden del día gracias a los teléfonos móviles y el resto de tecnologías, que facilitan mucho la comunicación. «Gracias a las redes sociales y aplicaciones de mensajería, los niños pueden contactar con sus familias un par de veces a la semana,». Esta comunicación, es importante, aunque no siempre es buena de forma continuada para la adaptación de los niños y es un momento para saludar y acordarse de sus seres queridos que dejaron atrás.
El éxito del programa no sería posible sin el apoyo de instituciones, empresas y particulares de Cantabria. Gabriel Herrería ha agradecido especialmente a las familias de acogida y las personas que trabajan en el programa y la Asociación Cantabria por el Sáhara, describiéndolas como la «pata fundamental» del programa. «Sin las familias, no podría haber Vacaciones en Paz,» ha afirmado, destacando el trabajo voluntario y el compromiso solidario, que a menudo no se ve reflejado en los medios de comunicación.