El informe AROPE sobre la pobreza aboga por una Ley autonómica de vivienda que recupere su función social
129.000 personas en Cantabria se encontraban en 2023 en riesgo de pobreza y/o exclusión social, una cifra que subió en 15.000 personas respecto al año anterior y que hace que la tasa AROPE, que mide indicadores relacionados con la pobreza y la exclusión social, suba hasta el 22% situando a Cantabria como la segunda comunidad autónoma con mayor aumento del indicador.
La presentación del informe AROPE Cantabria este lunes marca el arranque de los distintos actos de la Semana para la erradicación de la pobreza, que organizan conjuntamente EAPN y la Coordinadora Cántabra de ONGDs, mezclando así la atención a la pobreza más cercana con las desigualdades que sufren los países en vías de desarrollo.
Tras un fin de semana marcado por la multitudinaria manifestación por la situación de la vivienda (y en Cantabria después de nuevas declaraciones negacionistas del consejero de Vivienda, Roberto Media, que centra el problema en las ocupaciones pese a que sólo fueran dos el último trimestre), el informe destaca la importancia de que la vivienda recupere su función social, ya que actualmente su regulación está a merced del mercado.
EAPN Cantabria, entidad que agrupa a decenas de organizaciones sociales que trabajan directamente con personas en riesgo de pobreza y exclusión social. ha reclamado la aprobación de una Ley autonómica de Vivienda, subrayando que esta “debe ser considerada como una herramienta esencial para la inclusión social y no sólo como un bien de consumo”.
LAS TRANSFERENCIAS DEL ESTADO, CLAVES
En general, y a pesar de los esfuerzos, los datos muestran un empeoramiento en los indicadores de pobreza y desigualdad, señalando un problema estructural que afecta a una gran parte de la población cántabra.
Podría ser peor: el informe destaca que que, sin las transferencias económicas del Estado, la tasa de pobreza en Cantabria alcanzaría al 44,4% de la población, afectando a más de 2 de cada 5 personas.
En comparación, si solo se mantuvieran las pensiones de jubilación y supervivencia, la tasa de pobreza sería del 22,7%. Esto refleja la importancia de las políticas públicas en la contención de la pobreza en la comunidad, donde el papel del Estado es más significativo que a nivel nacional.
El informe también resalta que, si no existieran las transferencias públicas, la población en riesgo de pobreza en Cantabria aumentaría un 192,1%, una cifra alarmante que supera la media nacional. Estas cifras subrayan la urgencia de continuar y mejorar las políticas sociales y económicas que protejan a los sectores más vulnerables de la población.
MUJERES E INFANCIA, TASAS MÁS ALTAS
Las principales conclusiones son la desigualdad de género con una tasa AROPE que ha crecido más entre las mujeres (23,6%) que entre los hombres (20,2%).
La afectación en la infancia y juventud siendo el papel de los/as niños/as y adolescentes los que registran la tasa más alta de riesgo de pobreza, con un 24,8%, así como una pobreza severa de la población cántabra con un 6,7% viviendo con menos de 611 euros mensuales por unidad de consumo, lo que hace que la región pase del segundo al quinto puesto entre las comunidades con mayor pobreza severa.
El informe también resalta que la pobreza y la exclusión social son problemas estructurales que requieren una estrategia autonómica integral. Esta debería incluir políticas en educación, salud, garantía de ingresos, vivienda y fiscalidad, con un enfoque basado en los derechos humanos, la justicia social y la igualdad, traducido en compromisos presupuestarios y con coordinación entre las administraciones y el tercer sector.
De hecho, los datos del CIS muestran que más del 70% de la población cree que se deben hacer mayores esfuerzos para combatir las desigualdades a nivel global.
SEMANA CONTRA LA POBREZA
En un contexto global marcado por conflictos armados, emergencias climáticas y retrocesos en los derechos humanos, la 20ª Semana para la Erradicación de la Pobreza cobra especial relevancia.
“En este 2024, la paz y los valores democráticos deben ser defendidos con más fuerza que nunca. La guerra en Ucrania, el conflicto en Palestina, y otras crisis globales han dejado a millones de personas desplazadas y sus derechos cercenados”, subrayan las entidades.
Las actividades de la Semana Contra la Pobreza tienen como objetivo sensibilizar a la ciudadanía sobre estos problemas y promover acciones que contribuyan a un mundo más justo y solidario.
Entre los actos programados destacan:
- Martes 15: Encuentro de trabajo con Imanol Zubero, experto en el tercer sector, seguido de una conferencia abierta al público sobre las necesidades de una economía al servicio de la vida.
- Miércoles 16: Actividades de sensibilización sobre la situación de las personas sin hogar en la Plaza del Ayuntamiento de Santander, y un taller de derechos humanos impartido por UNRWA, la agencia de Naciones Unidas para los refugiados palestinos en la Librería La Vorágine.
- Jueves 17, Día Internacional para la Erradicación de la Pobreza: Representación teatral «Debajo del puente» en la Filmoteca de Cantabria, una obra que aborda la exclusión social y el sinhogarismo.
Además, durante toda la semana, estarán disponibles dos exposiciones: «Las causas de la pobreza» en el Centro Cívico Callealtero y «¿Qué es el consumo responsable?» en el Centro Cívico Numancia.
