Los raqueros, el conjunto escultórico de José Cobo ubicado en el muelle –la denominación tradicional de la zona- lucían este martes con el pañuelo encarnado que escribió Chema Puente y canta prácticamente toda la ciudad y sus pueblos en ‘Santander la marinera’, la habanera que pese a contar con apenas veinte años de historia, se ha convertido en el himno popular de la capital.

Los raqueros, le explicaba un paseante a un matrimonio colombiano, eran niños humildes que se buscaban la vida, y aunque se quiso cargar a la palabra de connotaciones más negativas, en la batalla de la memoria ha ganado el cariño por quienes representan una identidad popular y marinera en un Santander que no siempre la ha tenido en cuenta y que es la misma esencia que captó, conservó y transmitió el rabelista de Cueto, fallecido este sábado.

Fallece Chema Puente, una huella imborrable de Santander

Desde entonces, en lo que es un reconocimiento a que los santanderinos valoran la memoria, su historia y lo popular tanto o más que otros tópicos, todo son recuerdos y reconocimientos. Desde el aluvión de mensajes del fin de semana al cariñoso y sentido entierro, hasta distinciones más institucionales: el Gobierno de Cantabria anunciaba la creación del Premio Chema Puente a quienes conservan y divulgan el foclkore (cuando falleció Oscar Muñiz, se bautizó con su nombre al premio de cómic y novela gráfica). Desde el PRC, su portavoz en Santander Felipe Piña pedía que Escenario Santander lleve el nombre de Chema Puente.

Dinamita en nuestras entrañas

Otros son más populares, como su música: desde el canto de su himno, ya el de todos, en el partido del Racing el pasado fin de semana

El Sardinero rompe a cantar en homenaje a Chema Puente

hasta el que se está moviendo en redes sociales –se lo hemos visto a Regino Mateo o a Arantxa Callejo, que invitan a rendir homenaje este sábado 7, a las 12.00 horas, acudiendo, como en la canción, a Puertochico, frente de Peña Cabarga, ataviados con el pañuelo encarnado –que hay voces que proponen que se generalice en las fiestas de Santander- cantar el himno y después… a pasear.