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Cruz Roja reúne a medio centenar de empresas y entidades sociales para impulsar la inserción laboral de personas con problemas de salud mental
Cruz Roja Cantabria ha reunido esta mañana a más de medio centenar de representantes de empresas y organizaciones sociales en la jornada “Salud mental como puente hacia la inserción laboral”, un encuentro que ha servido para analizar los desafíos que enfrentan las personas con problemas de salud mental en el acceso al empleo y proponer estrategias inclusivas.
El evento, celebrado en el Garden Café Solvay de Barreda, ha contado con la participación de expertas en psicología, inclusión social y empleo, quienes han abordado la necesidad de sensibilizar a las empresas, adaptar los entornos laborales y reforzar el trabajo en red entre administraciones y entidades sociales.
María Eugenia Bouzas, presidenta de Cruz Roja Torrelavega, subrayó el papel fundamental del empleo en la lucha contra la pobreza:
“Hemos encontrado en el empleo el gran recurso para sacar a las personas y a sus familias de la pobreza. Salud mental y empleo son fundamentales”.
María Ordax, representante del Colegio Oficial de Psicología de Cantabria, destacó que la salud mental en el ámbito laboral debe abordarse desde un enfoque preventivo, adaptando los puestos de trabajo a las diferencias individuales de los empleados.
“La prevención de riesgos psicosociales debe estar encima de la mesa. No solo hay que actuar cuando el problema aparece, sino crear entornos que eviten el deterioro de la salud mental”.
Explicó que el tejido empresarial español, compuesto en su mayoría por pymes y autónomos, enfrenta dificultades para implementar estrategias de bienestar laboral, ya que carecen de recursos específicos.
“Durante la pandemia, ATA recibió más de 30.000 llamadas de autónomos en una situación emocional límite. La presión económica y la sobrecarga de trabajo dejan muy poco margen para cuidar la salud mental” , señaló.
Ordax también alertó sobre la proliferación de enfoques que no están basados en evidencia científica.
“El mindfulness y otras técnicas pueden ayudar a corto plazo, pero si no se actúa a nivel organizacional y de liderazgo, el problema persiste”.
Concluyó que para lograr un cambio real, las empresas necesitan apoyo económico y asesoramiento en salud mental, señalando que “estamos en un momento clave para impulsar medidas que ayuden a pymes y autónomos a crear entornos laborales más saludables”.
Leyre Rivas Monasterio, directora técnica de ASCASAM, explicó que muchas personas con problemas de salud mental requieren un proceso de preparación antes de acceder a un empleo, ya que enfrentan dificultades añadidas como ansiedad, baja autoestima o falta de habilidades sociales.
“Desde ASCASAM trabajamos en dotar a las personas de herramientas que les ayuden a desenvolverse en un ambiente laboral, mejorar su confianza y reducir la ansiedad ante situaciones profesionales”.
Presentó el programa “Inicia”, que ofrece asesoramiento integral y un itinerario personalizado para cada persona, trabajando tanto con el trabajador como con el entorno laboral para garantizar una inserción sostenible.
“No solo trabajamos con la persona, sino también con su entorno. Es clave que las empresas y equipos de trabajo comprendan las necesidades de estos empleados”.
Asimismo, destacó el papel de los centros ocupacionales, que sirven como espacios de preparación para aquellas personas que aún no se sienten listas para integrarse en el mercado laboral.
Por su parte, Eloísa Velarde, directora de Proyecto Hombre, abordó la relación entre adicciones y salud mental, señalando que cada vez es más común que las personas en tratamiento por consumo de sustancias tengan un trastorno psicológico asociado.
“Las personas con problemas de adicción enfrentan obstáculos personales, sociales y estructurales. Tienen dificultades para afrontar entrevistas, gestionar la presión laboral y, sobre todo, enfrentan un estigma que muchas veces les cierra las puertas del empleo”.
Explicó que muchas personas desconocen sus derechos en cuanto a bajas laborales o reconocimiento de discapacidad, lo que las deja en una situación de mayor vulnerabilidad.
“Las entidades sociales hacemos mucho en este ámbito y, en muchos casos, vamos por delante de la administración. No es que seamos mejores, pero tenemos mayor flexibilidad para adaptarnos a las necesidades reales de las personas”.
Velarde insistió en la importancia de la formación en las empresas para que los equipos comprendan la realidad de la salud mental en el trabajo.
“Las empresas deben contar con formación específica para que todos los empleados entiendan cómo apoyar a compañeros con problemas de salud mental”.
Las principales barreras detectadas por Cruz Roja en la inserción laboral
Finalmente, Gema Sáiz, técnica del programa Reto Social Empresarial Plus de Cruz Roja Torrelavega, explicó que muchas personas con problemas de salud mental enfrentan grandes dificultades para encontrar empleo, ya que llegan en situaciones de vulnerabilidad extrema, con autoestima baja y miedo al rechazo.
“Nos encontramos con personas con una ‘mochila’ muy grande a sus espaldas, con experiencias de rechazo que les han debilitado. La falta de empleo afecta directamente a sus relaciones sociales y su estabilidad emocional”.
Destacó que antes de acceder a un trabajo, muchas personas necesitan pasar por un proceso de adaptación, en el que recuperen hábitos de vida saludables, aprendan a cumplir horarios y gestionen la frustración.
“A veces, detectamos que la persona necesita un empleo, pero no es lo que necesita primero. Antes, debe recuperar su estabilidad personal y fortalecer su confianza”.
También alertó sobre el aumento de adicciones entre las personas en búsqueda de empleo y la necesidad de trabajar en red con otras entidades para ofrecer una atención integral.
“No podemos quedarnos solo en la detección del problema. Necesitamos una red que nos permita actuar de manera efectiva y rápida”.
Finalmente, insistió en la importancia de sensibilizar a las empresas y adaptar los entornos laborales para hacerlos más inclusivos.
“Si las empresas no están preparadas para adaptarse, la inserción laboral será insostenible. Debemos trabajar juntos para que la salud mental sea una prioridad en el mercado laboral”.
Compromiso por un mercado laboral inclusivo
Esta jornada se enmarca en el Plan de Empleo de Cruz Roja, dentro de la iniciativa «Oportunidades que cambian vidas», con el apoyo de la Unión Europea, el Gobierno de Cantabria y el Servicio Cántabro de Empleo.
Desde Cruz Roja se trabaja activamente en programas de formación, orientación y apoyo psicológico para facilitar la inserción laboral de personas con dificultades. Con este encuentro, la organización reafirma su compromiso con la sensibilización y promoción de un mercado laboral más inclusivo y accesible.