
STEC le hace un ‘croquis’ al Gobierno sobre cómo se gestiona una negociación
Quienes participaron o acompañaron a la manifestación del pasado jueves por las calles de Santander (más de 5.000 personas reivindicando mejoras en las condiciones de los docentes cántabros) o quienes palparon cómo estaban los centros educativos en esa jornada de huelga seguramente se tuvieran que frotar los ojos y tuvieron la sensación de que era el mundo al revés tras comprobar que la reacción del Gobierno de Cantabria a esa impresionante capacidad de movilización fue emplazar a los sindicatos educativos a mover ficha ellos, además de ofrecer unos datos para minimizar el impacto de la huelga y una nueva tribuna en prensa del consejero.
Un comportamiento que choca con lo que es habitual en cualquier conflicto laboral (baste ver una protesta en la industria): tras una reivindicación potente de la parte que reclama, le corresponde al que tiene la capacidad de decidir el reaccionar en base a la reflexión sobre lo sucedido.
STEC, el sindicato docente mayoritario, uno de los convocantes, ha calificado de “preocupante” esta reacción, que refleja un “desconocimiento total de la realidad”. De hecho fue desde el Gobierno desde donde se dijo que no se moverían de su respuesta a la propuesta docente salvo que sucediera algo “extraordinario”, como, recalcan, ha sucedido con el paro y la “histórica” manifestación y así se lo trasladan en un ‘croquis’ gráfico difundido en medios en redes.
Asimismo, sus responsables han criticado el “ridículo” dato de seguimiento (primero un 24%, luego un 43%) que contrasta con el “exhaustivo” cálculo que hizo la Junta de Personal Docente, ,que evidenció la “trampa” de la Consejería al calcular los porcentajes sobre el total de docentes –incluyendo por ejemplo los que estaban de baja- en lugar de los llamados realmente a parar.
Además, STEC ha criticado otras actuaciones del Ejecutivo, como la circular que recomendaba a equipos directivos llamar a la policía ante encierros en los centros o el trato diferenciado hacia la enseñanza concertada, a la que —según un correo enviado por la propia Consejería— se garantizó una subida relacionada con la adecuación de los conciertos educativos.
CCOO y SATSE también denuncian la falta de diálogo en Sanidad
El conflicto en educación se suma al malestar en el ámbito sanitario. La Federación de Sanidad de Comisiones Obreras (CCOO) ha denunciado que el consejero César Pascual sólo complementa el salario por incapacidad temporal a personal facultativo, excluyendo a otras categorías del Servicio Cántabro de Salud (SCS). La organización exige negociar de forma conjunta en la mesa sectorial y recuerda que hay más de un centenar de categorías profesionales, muchas en primera línea, que se ven perjudicadas por esta decisión.
Por su parte, el sindicato SATSE Cantabria, que representa al personal de enfermería, también ha acusado al consejero de Salud de mantener una actitud de bloqueo. Según su secretaria general, Ana Samperio, “el diálogo con el consejero es imposible”, lo que ha llevado a que el déficit de enfermeras sea tratado directamente en el Parlamento. SATSE critica además la falta de medidas concretas para mejorar la situación del Hospital de Laredo, que consideran uno de los más afectados por la falta de personal.