Un mosaico de arte urbano revive la escalera de la calle San Antón
Un mosaico de azulejos de colores ha convertido la escalera de la calle San Antón en un espacio decorado por el arte gracias a las intervenciones que han diseñado los artistas locales Rubén Martínez, Sara Morante y Fernando Navarro durante el Festival de Arte Público Desvelarte.
La cita, organizada desde 2009 por la Asociación Cultural de Artistas Independientes de Cantabria (ACAI) con el apoyo de la Fundación Santander Creativa (FSC), ha desparramado estos días una decena de acciones artísticas en fachadas, rincones y espacios de la capital cántabra.
En su undécima edición, el colectivo dirigido por Laura Irizábal, Javier Lamela y Zaida Salazar, ha invitado a un puñado de creadores internacionales y locales para tratar de acercar el arte público a la ciudadanía y ofrecer nuevos horizontes y miradas donde reflejarse. El apartado Huellas es quizá uno de los más representativos.
Las huellas son las intervenciones que cada año plasman varios artistas callejeros como las que han diseñado Martínez, Morante y Navarro para la escalera de la calle San Antón. En este caso, sus creaciones han sido colocadas por la empresa Hisbalit en forma de azulejos vítreos para plantear un doble juego visual en el espacio: el de las contrahuellas que originan una única imagen y el de las distintas piezas de colores que configuran el mosaico.
El primero en decorar este lugar fue el artista 7Pies en la edición de Desvelarte 2018, un trabajo con el que ha continuado la ilustradora Sara Morante, que ha plantado allí su jardín urbano, su ‘chinoiserie’ particular- ese estilo artístico europeo que recoge la influencia China-. Morante ha ilustrado más de cincuenta libros. En 2012, recibió el Premio Euskadi de Ilustración por su trabajo en ‘La flor roja’ y en 2008, el Premio Nacional de Arte Joven del Gobierno de Cantabria en la categoría Ilustración. Sus obras han formado parte de exposiciones en el Museo de Altamira, la sala Ernest Lluch de Donostia o la Biblioteca Central de Cantabria.
En otro de los tramos ha trabajado Rubén Martínez, un diseñador gráfico que combina su profesión en el estudio ‘PURÉ’ con otras inquietudes creativas como su marca y alter ego ‘The Smallest Boy’. Su propuesta tiene que ver con el juego, por eso en su instalación puede verse y leerse ‘Game over’, el tradicional mensaje que aparece en los videojuegos para indicar el final de la partida.
Por su parte, Fernando Navarro, que estudió Bellas Artes en la Universidad del País Vasco (UPV) y es socio fundador del estudio creativo Mutta, ha inventado una pieza que refleja su interés por la simplicidad del mensaje, la oscuridad y la escasez de conceptos. Se trata de ‘Good luck’ (buena suerte).
Pero el recorrido por las huellas de Desvelarte no acaba aquí. En la fachada lateral de la calle Santa Clara, número 11, se puede ver desde hace unos días la obra del italiano Fabio Petani, una desordenada armonía de líneas, formas y volúmenes que se integran entre sí con colores suaves y armoniosos mezclados con elementos que se rompen. Fusiona arte, química y naturaleza.
La artista y diseñadora portuguesa Aheneah descubrió el mundo textil estudiando diseño gráfico. Una improbable combinación que llevó a la práctica cuando mezcló esos conocimientos con las labores de bordado que le enseñó su abuela. Su objetivo es deconstruir, descontextualizar y transformar una técnica tradicional en una gráfica moderna conectando culturas y generaciones. Su propuesta se puede apreciar en el colegio Menéndez Pelayo (C/López de Vega, 15).
La creadora vasca Udane Juaristi dejó su impronta en el instituto Torres Quevedo. Juaristi tiene un estilo propio, mezcla pintura y collage y encuentra la inspiración en la calle creando escenas a partir de las fotografías que toma en sus viajes por el mundo, a las que da vida y color.
En la fachada del número 5 del Paseo Menéndez Pelayo ya luce el trabajo del cántabro Quique Ortiz, que ha utilizado la pintura y el dibujo desde un punto de vista figurativo con tintes realistas y orientado a crear imágenes de ambientes y atmósferas intimistas, en su mayoría escenas nocturnas y oscuras. Imágenes perturbadoras e inquietantes que muestran la manipulación del hombre en el entorno, en la naturaleza.
De hecho, en estos últimos años, Ortiz ha documentado, a través de sus obras, las acciones del Frente de Liberación Animal (FLA), un colectivo de activistas que defiende los derechos de los animales y, entre otras cosas, denuncia su utilización en la industria textil y alimentaria.
El Poste C.A.R.L.O.S también es otra de las intervenciones esenciales de la cita. Ubicado en la rotonda situada entre la calle del Sol y el Paseo Menéndez Pelayo, ha sido intervenido por la catalana Regina Giménez, cuyas obras parten de imágenes y gráficos originalmente concebidos para fines didácticos, extraídos de libros obsoletos de astronomía, geografía y ciencia, que son aislados hasta el punto de otorgarles una autonomía formal y conceptual propia.