La Lambiona, emblemático local que recientemente anunciaba su cierre,  vuelve a Torrelavega durante las fiestas de ‘La Virgen Grande’ y reabre su nuevo local en la Calle Pando 2.

«Otra vez la cultura no le puede ganar la partida a los cacahuetes”

Para la reapertura organizan ‘La Lambiona Fest’ que comenzará el día 9 de agosto con el DJ Tudan-ak. El sábado será el día principal, con actuaciones de los grupos: Mármol, Cüter, Zientotrentaiuno y Seeking Sickness a partir de las 22:00 horas.

El miércoles 14 de agosto, con Dirty Knives y Perenne. Como novedad, y aprovechando el espacio de su nuevo local, el viernes tendrán dos conciertos simultáneos. En su planta alta, sesión hardcore punk con Los Mendas, y en la planta baja, Dance hall con Nino y Balihas.

Para finalizar, el sábado 17 de agosto sesión Inglaterra eighties de nuevo con Los Mendas, y Dance hall con el colectivo Palos y Piedras.

La intención, según el propio dueño, es «reabrir de forma continua como anteriormente.» Se trata de un local «para conciertos, pinchadas, proyecciones…» todo para «continuar con el propósito cultural, asemejándolo a un centro social», además tienen «más cosas nuevas en mente.»

NUEVO LOCAL, NUEVA PERSPECTIVA

El bar cerró sus puertas con un festival y abrirá las nuevas con otro. La despedida amarga que dieron el pasado julio desaparece ahora en un local con más espacio y cercano a la zona donde se concentran los principales bares en Torrelavega.

Como explicaron en su comunicado de cierre en Facebook, se vieron atrapados en un modelo de conciertos los fines de semana que no les permitía sobrevivir durante el transcurso de la semana.

Los Escapaos en la antigua Lambiona (foto: Jorge Palacios Insonoro)

Asimismo, recordaron que el proyecto no nació como una sala de conciertos, sino como un bar en el que de vez en cuando hubiera música en directo, pero se acabó convirtiendo en eso. Además, el hecho de que la licencia y horarios fueran de bar como tal, limitaba tanto los horarios como el número de conciertos.

Sobre esto, lamentaron también que los dueños del local no rebajasen sus pretensiones económicas, lo que les habría podido ayudar a no depender tanto de los ingresos por los conciertos, relajar la actividad, y mantener la buena “sintonía” y “armonía” que tenían con los vecinos.

Por otro lado, es común pasear por Torrelavega y ver el cierre de locales comerciales y de ocio, que no pueden competir con las grandes marcas, centros comerciales y los precios del alquiler.

Es precisamente esto lo que ha llevado a que bares como La Lambiona o el Groez hayan tenido que desplazarse a otros locales por la subida de precios del alquiler, que también afectan a muchas familias que intentan resistir en sus viviendas ante unos costes difíciles de asumir.