Marcos Ricardo Barnatán presenta sus dos últimos libros en Gil
Este martes 27 de agosto, a las 19 horas, la Librería Gil acoge a Marcos Ricardo Barnatán, que presentará sus dos últimos libros ‘El libro de David Jerusalem y otros poemas’ y ‘Arcana mayor’, ambos de la editorial Ars poética. En el acto intervendrán además Elda Lavín y Mario Crespo.
Barnatán, nacido en Buenos Aires en 1946, se trasladó a Madrid en 1965, donde estudió filosofía y letras de la Universidad Complutense, y donde entró en contacto con los poetas españoles de su generación.
Es autor de varios libros sobre Jorge Luis Borges y estudioso de la mística judía, a la que ha dedicado algunos ensayos. Ha publicado también cuatro novelas, ‘El laberinto de Sión’, ‘Gor’, ‘Diano‘ y ‘Con la frente marchita’, todos reunidos en el reciente ‘La República de Mónaco’.
En 1967 obtuvo el accésit del Premio Adonais, sus poemas han sido traducidos a varias lenguas, y es colaborador habitual de distintas publicaciones españolas y extranjeras, así como crítico de arte del periódico El Mundo.
‘EL LIBRO DE DAVID JERUSALEM Y OTROS POEMAS’ Y ‘ARCANA MAYOR’
Las páginas de ‘El libro de David Jerusalem’ juegan peligrosamente con la realidad. Es necesario aclarar que el verdadero autor material de estos poemas es el propio Marcos-Ricardo Barnatán, aunque el poeta David Jerusalem ha sido el inspirador último del sentimiento que hay en estos versos.
David Jerusalem es un nombre arquetípico inventado por Borges, y al ingenio del mismo escritor se deben los títulos de los dos únicos poemas mencionados en su cuento. Todo lo demás es el deseo del autor de recrear a ese fantasma, símbolo y cifra de seis millones de hombres verdaderos que perdieron sus vidas y sus nombres en una absurda hoguera que ardió en Europa entre 1939 y 1945.
Por otro lado, ‘Arcana Mayor’ es una recopilación de poemas, llenos de un sin número de alusiones bíblicas, cuando no referencias cabalísticas ligadas a las enseñanzas de la tradición judía, o simplemente míticas o literarias. Son la sustentación natural del pensamiento, nunca una vana apoyatura estética, “la belleza surgirá, si es que surge, por imanación directa del lenguaje” recogen sus fragmentos.