Julio Cabrero, alcalde de Polanco y diputado del Partido Popular en el Parlamento autonómico, se enfrenta este miércoles a una acusación de prevaricación por la contratación del polideportivo municipal.

No estará solo ante la Sala de lo Civil y penal del Tribunal Superior de Justicia de Cantabria: con las mismas acusaciones y la misma petición de pena (ocho años de inhabilitación), se juzga también a su teniente de alcalde, Luis Barrero; y a su predecesor en el cargo, Miguel Ángel Rodríguez.

Ninguno de los tres, según entienden el Ministerio Fiscal y la acusación particular (un concejal del Ayuntamiento), aprobó el expediente necesario para los trámites que entraban dentro de sus responsabilidades.

Por un lado, Miguel Ángel Rodríguez (del partido PIR, Progresistas Independientes Regionalistas) encargó en el año 2006 la redacción del proyecto, pese a no haber iniciado el expediente de contratación, necesario al ser una inversión superior a los 30.000 euros.

Al año siguiente, el alcalde era Julio Cabrero, del PP, y Luis Barrero (del partido Alternativa Ecologista Socialista, ex socialista –Polanco es complejo–) su teniente de alcalde (en quien había delegado la posibilidad de firmar actos administrativos), y encargaron la modificación del proyecto, así como la dirección de obra, también sin expediente. En este caso las inversiones ascendían a 51.600 y 110.200 euros.

El Fiscal tiene bien claro que estas prácticas incumplían la ley, y añade que los acusados lo sabían, lo que encuadra los hechos en el delito de prevaricación (dictar una resolución injusta a sabiendas).

Y pide para cada uno de ellos penas de ocho años de inhabilitación para el empleo o cargo público.

El alcalde, en la fase previa del proceso, justificaba que ese tipo de prácticas eran habituales en el Ayuntamiento, y derivaba la responsabilidad en su entonces socio de Gobierno y teniente de alcalde.

Luis Barrero, en su escrito de defensa, argumenta que esa responsabilidad no era suya de forma directa, sino delegada, y que además él no intervino en ninguna de las partes del proceso de la contratación del polideportivo.

Y añade que, en cualquier caso, desconocía la importancia de ese trámite, que no le fue comunicada además por ningún servicio jurídico del Ayuntamiento de Polanco.

Para ello, pide que se aporte una serie de documentación municipal en la que vincula al alcalde con la toma de decisiones.

Por su parte, su predecesor, Miguel Ángel Rodríguez, matiza que su única participación en el proceso fue en una parte que ascendía a 17.400 euros, para la cual no hacía falta ese expediente.

Todos confían en el testimonio de la secretaría municipal, a quien derivan la responsabilidad de avisar de las ilegalidades en los procesos administrativos que conciernen al Ayuntamiento.