El Gobierno elabora un mapa de infraestructuras asistenciales para afrontar el envejecimiento de la población
La Consejería de Empleo y Políticas Sociales del Gobierno de Cantabria está elaborando un mapa de infraestructuras asistenciales que resuelva las carencias de la red pública y permita atender la demanda, que va a ir en aumento como consecuencia del envejecimiento de la población.
Un trabajo que espera tener listo para esta próxima primavera, según ha explicado la consejera, Ana Belén Álvarez, que este miércoles ha presentado en rueda los datos de Cantabria sobre las prestaciones y servicios vinculados al Sistema para la Autonomía y Atención a la Dependencia (SAAD), acompañada por el director general de Políticas Sociales, Julio Soto, y por la directora del Instituto Cántabro de Servicios Sociales (ICASS), Maria Antonia Mora.
Con relación a las necesidades futuras de este sector, la consejera ha indicado que la demanda va a ir en aumento como consecuencia del envejecimiento de la población, por lo que la Consejería está elaborando un mapa de infraestructuras asistenciales que resuelva las carencias de la red pública y permita atender la demanda allí donde está la necesidad a través de una planificación rigurosa.
En la actualidad Cantabria cuenta con una red pública formada por 5.109 plazas residenciales y 2.210 plazas de centro de día. La previsión del ICASS es que este año las plazas puedan incrementarse con 72 nuevas concertadas, ya que la construcción de nuevas infraestructuras residenciales tarda un mínimo de dos años.
En cuanto a expedientes de valoración y grado de dependencia, Ana Belén Álvarez ha indicado que a 31 de diciembre había 26.429 expedientes abiertos, de los que 25.693 cuentan ya con un dictamen.
De ellos, 21.354 han sido reconocidos en situación de dependencia y el 96,9% ya están resueltos con prestación de servicio, con desistimiento o lista de espera en función de las particularidades de cada uno de ellos. En concreto, en lista de espera hay 664 personas, el 3,1% del total de los expedientes.
La consejera ha insistido que en Cantabria no hay ninguna situación de emergencia que se quede sin cubrir y que no existe lista de espera para recibir prestaciones económicas, ni para Teleasistencia, ni para centros de día, y que lo que provoca la lista de espera es la fuerte demanda de plazas de atención residencial en mayores.
MAYOR GASTO POR HABITANTE DE ESPAÑA
Según ha explicado Ana Belén Álvarez, somos la Comunidad Autónoma que más invierte por dependiente, con un promedio de 7.697 euros año frente a la media nacional de 6.590. Igualmente, somos la autonomía con mayor desarrollo en infraestructuras de atención, con la mayor tasa de España de plazas residenciales y de centros de día por población, el 8,8 y el 3,7 por mil respectivamente.
“En plazas residenciales duplicamos la media nacional y aventajamos en dos puntos a la segunda comunidad autónoma mejor posicionada (Castilla-La Mancha)”, ha apuntado.
Y por lo que respecta a las prestaciones económicas para cuidados en el entorno familiar, nuestra región también está por encima de la media nacional.
Informe Dependencia: Cantabria lidera el gasto pero se estanca en la atención
A LA ESPERA DE UN GIRO «SOCIAL» DEL ESTADO
No obstante, y pese a esos buenos resultados que colocan a Cantabria a la cabeza de España, Ana Belén Álvarez ha reconocido que la situación del SAAD es de “cierto estancamiento” debido al “sobresfuerzo económico” que ha tenido que hacer la Comunidad para compensar los recortes aprobados por el Gobierno del PP, que “si bien ha permitido mantener el Sistema, ha impedido el desarrollo del mismo”.
Desde las medidas de control del gasto introducidas en 2012, el recorte acumulado de la Administración General del Estado en Dependencia asciende ya a más de 5.000 millones de euros, considerando tan solo la supresión del nivel acordado, la reducción del nivel mínimo y la supresión de las cotizaciones de cuidadoras familiares.
De tal forma, del gasto público directo en dependencia, la Administración General del Estado (AGE) apenas soporta el 20 % y las CCAA el 80% restante, muy lejos de la pretendida aportación al 50%.
En Cantabria, las cifras son aún peores, porque el déficit de financiación acumulado desde que se iniciaron los recortes se estima en unos 58 millones de Euros.
Sólo en el pasado año 2018, Cantabria ha dejado de percibir del Estado 7,9 millones de euros, como consecuencia de los recortes contenidos en el RD 20/2012. Según ha explicado la consejera Álvarez, con ese dinero se podrían haber atendido 1.021 nuevos dependientes, y se hubiesen podido crear 182 nuevos empleos en la Comunidad Autónoma.
En 2018 el gasto total en dependencia en nuestra comunidad, sin contar las aportaciones de los usuarios, fue del orden de 137 millones de euros, de los cuales la AGE aportó tan solo 17,6 millones (13%) y el 87% restante fue financiación del Gobierno de Cantabria (119,5 millones de euros).
A este respecto, Ana Belén Álvarez ha mostrado su deseo de que, con el nuevo Gobierno progresista presidido por Pedro Sánchez, “sensible a la agenda social”, incremente su aportación a la financiación del sistema, “y unido al compromiso de todo el Consejo de Gobierno de Cantabria, nos permita dar un nuevo impulso a la Ley de la Dependencia y a las políticas sociales en general”.
RETORNO DE LA INVERSIÓN EN DEPENDENCIA
Finalmente, la consejera ha hecho referencia a la importancia de este sector como fuente de empleo. El Sistema de la Dependencia genera en Cantabria en torno a 3.200 puestos de trabajo directos y generó en el último ejercicio 2018 más de 51,1 millones de euros provenientes de las cotizaciones a la Seguridad Social, IRPF de los trabajadores o recaudación de IVA e impuesto de sociedades por los servicios prestados.
Además, la tasa de retorno de los recursos asignados a este sector es muy alta: de cada euro que se invierte 0,59 retornan a la Administración y corrobora la naturaleza del trabajo de este sector: intensivo en mano de obra y generador de elevados rendimientos sociales. Si se incluye el ahorro derivado de las prestaciones por desempleo y la cotización a la seguridad social de los cuidadores, este retorno asciende a 0,66.
El multiplicador del Producto Interior Bruto para Cantabria asciende a 2,38 de manera que, por cada euro gastado por la Administración en el sector, la producción asciende en 2,38 euros. La generación de empleo es de 36 trabajadores por cada millón de euros de gasto de la Administración.
La inversión en la atención a la Dependencia, ha dicho Ana Belén Álvarez, tiene, además de los efectos directos e indirectos valorados (traducidos en empleo y generación de riqueza), otros difíciles de cuantificar y que van más allá de la mejora en la calidad de vida de los afectados, como son la capacidad de generar empleo y riqueza vinculada a la innovación y desarrollo tecnológico.