Cantabria despide el invierno cantando las marzas
Con el final de febrero, llega una de las tradiciones de Cantabria, las marzas, esos cantos comunitarios por las calles con los que se destierra el invierno y se abre paso a la primavera, además los mozos de los pueblos aprovechaban para pedir el aguinaldo.
El periplo marcero se iniciará, como es tradicional, en el Parlamento de Cantabria el lunes día 2 cuando a las 20:00 horas, tras su paso por la Alameda de Oviedo, cantarán la Asociación Ronda Marcera de Torrelavega, el coro Ronda Altamira y la ronda ‘Las fuentes’ de Reinosa.
Anteriormente, el coro montañés ‘El Sabor de la Tierruca’, actuarán el sábado 29 en la iglesia ‘Nuestra señora de Belén’, en La Albericia, y posteriormente en el Alisal y en Cazoña.
Siguiendo en Santander, también actuarán la coral ‘Tierra Verde’, dirigida por José Ramón Ríoz, en la asociación ‘Manuel Llano’, y los ‘Marceros de la Bahía’ harán su ronda el día 1 de marzo. Por su parte, el coro ronda ‘Valle de Iguña’ actuarán el sábado en distintos lugares de la localidad de San Vicente de León, Iguña.
El consejero de Cultura, Pablo Zuloaga ha destacado la “necesidad” de preservar las marzas como una muestra “esencial” de nuestro legado inmaterial, en la presentación de una nueva edición de estos cantos tradicionales que se ha celebrado en el Museo Etnográfico de Cantabria, METCAN, con la presencia de la asociación ‘Ronda Marcera’ de Torrelavega, quienes han ofrecido un pequeño recital.
Tras dar la bienvenida a este coro, Zuloaga ha indicado que la elección de este museo “no ha sido casual” pues ha explicado que tiene como función la “protección y difusión” del Patrimonio Inmaterial de nuestra región, y ha recordado que las marzas fueron declaradas BIC en el año 2015.
En este sentido, el vicepresidente ha mostrado su confianza en que las marzas sean conocidas por los más jóvenes, “y que tomen el testigo para seguir manteniendo esta tradición”.
Por su parte, Juanjo Crespo, presidente de dicha asociación que lleva cantando marzas desde hacer 30 años, ha explicado el origen de estos cánticos “que son eminentemente rurales”, y que nacieron como una manera que los “mozos” tenía para pedir el “aguinaldo” por los trabajos realizados en el invierno.
Tras estas intervenciones, este coro ronda ha interpretado una serie de marzas.