La PAH consigue el primer éxito en una negociación con Liberbank
La Plataforma de Afectados por las Hipotecas de Santander ha conseguido su primer éxito en una negociación con Liberbank, el banco del que forma parte la antigua Caja Cantabria.
Para la PAH, se trata de un logro porque hasta la fecha Liberbank se venía mostrando muy reacia a dialogar sobre los casos que se les trasladaba, y en estos momentos la plataforma viene gestionando una decena de situaciones.
En este caso, se trataba de un matrimonio que había puesto su vivienda como aval de un crédito que habían solicitado para su negocio, un establecimiento hostelero en la zona del Sardinero.
Pero les llegó una mala racha: problemas de salud encadenados y las consecuencias de una decisión sobre la Ley de Costas que afectaba a la concesión a su negocio.
El resultado fue que el establecimiento cerró, y dado que el propietario, al igual que el 40% de los casos que atiende la PAH, era autónomo.
En consecuencia, no tenía la cobertura por el desempleo y las cuentas empezaron a descuadrárseles.
El crédito que habían pedido (por un importe total de hasta 30.000 euros, de los que les quedaban por abonar unos 20.000) les suponía costes de 1.000 euros al mes.
Lo que han conseguido en la negociación es unas nuevas condiciones para pagar el préstamo, es decir, pagarán su deuda, pero de una forma más adaptada a sus necesidades actuales, con una cuota más asumible.
De esta forma, han conseguido evitar la subasta judicial del piso que habían puesto como aval al crédito, y que se iba a subastar desde el banco por un precio de 30.000 euros frente a los aproximadamente 150.000 euros en que lo adquirieron.
La negociación fue posible gracias a una de sus acciones, la ocupación de una de las oficinas, alternativa por la que optaron ante las negativas previas a estudiar este y otros casos.
Como consecuencia de esa acción, Liberbank accedió a delegar la negociación de los casos en una persona, el director de zona, que es con quien se ha llegado a este acuerdo y con quien se abordarán los diez que quedan.