“Se alzan barreras cada vez más altas e insidiosas en las fronteras del sur de Europa»
La pandemia de la Covid-19 ha obligado a todas las ONGs a repensar y transformar la Caravana Europea 2020, que en enero pasado habían decidido realizar a los Balcanes. “Y queremos hacerlo manteniendo sus ideas y fuerza, adaptándolas a las nuevas y difíciles circunstancias provocadas por la pandemia y por las respuestas que los gobiernos europeos están dando a la misma” explican desde ‘Ongi Etorri Errefuxiatua’, una de las organizadoras.
Siguen siendo centrales en el desarrollo de la Caravana la denuncia de la complicidad de los gobiernos europeos en las guerras en África y Oriente Medio, origen del desplazamiento forzoso de centenares de miles de personas; o la denuncia de la violación creciente de los derechos de las personas migrantes dentro de Europa y en sus fronteras, especialmente en la olvidada Ruta Balcánica y en el Mediterráneo.
Además, exigen un cambio radical de las políticas anti inmigrantes de la Unión Europea. Buscan la regularización de millones de personas invisibles y explotadas, y también el fortalecimiento y la ampliación de la incipiente red europea, “para dar una respuesta mejor a esas políticas y a las medidas aún más duras que ya se están anunciando ahora con el pretexto de la pandemia en el sur del planeta” señalan.
Y todo ello se proponen hacerlo en la nueva modalidad de Caravana que realizarán a finales de agosto. Ante las dificultades que la pandemia todavía causa para la movilidad internacional, con la gran cantidad de personas de años anteriores, “nos planteamos la próxima Caravana como una Caravana Europea a realizarse, de forma simultánea y coordinada vía internet, en diferentes lugares de Europa” indica la ONG.
Nacionalmente, la ‘Caravana Abriendo Fronteras’ realizará sus actividades en Valencia y Bilbao, mientras que ‘Carovane Migranti’ y ‘Tous Migrants’ lo harán, principalmente, en Torino, Trieste y Briançon, los días 27, 28, 29 y 30 de agosto.
En Valencia y en Bilbao, las mañanas serán un momento para conocer y debatir sobre experiencias, luchas y propuestas en base a intervenciones comunes vía online. En ellas participarán personas con perfiles diferentes, ya sean testigos, activistas o protagonistas de las experiencias y luchas aquí en Europa, pero también en África, Asia y las Américas.
Por las tardes la Caravana en estas ciudades se moverá para denunciar directamente situaciones que consideran” atentan contra los derechos de las personas migrantes en las áreas locales”, o también para conocer experiencias positivas.
Por su parte, Carovane Migranti, junto con Tous MIgrants, para sus debates se basará también en las exposiciones comunes online y se moverá principalmente desde Torino a Trieste (puerta y frontera de los Balcanes) y desde Trieste a Briançon (frontera en Francia), alrededor de 1400 km. El centro de expulsión de migrantes de Graditza y los campos de explotación de la provincia de Cuneo serán también lugares claves en ese recorrido.
En conjunto, “somos y actuaremos como una Caravana Europea que , entre otras muchas cosas y sin olvidarse de lo que ocurre en Mesoamérica, África y Asia, denuncia la situación de injusticia, violencia, explotación y racismo en los Balcanes , en Grecia y en el resto de fronteras europeas, incluido el Mediterráneo”, así como en el interior de la Unión Europea, “tanto en las explotaciones agrícolas de Vittoria (Sicilia), Saluzzo (Piamonte), Lleida, Navarra, Almería y Huelva, como en el trabajo doméstico realizado por millones de mujeres migrantes en toda Europa” concluye Ongi Etorri Errefuxiatua.
COVID-19 COMO NUEVO ESTIGMA
“La fortaleza Europa, lejos de detener su avance en el contexto global de pandemia, está dando otro salto cualitativo en una dirección autoritaria para revitalizar sus prácticas necropolíticas con estrategias renovadas” señalan desde la organización de la ‘Caravana Abriendo Fronteras’.
Se han cerrado los puertos, se ha suspendido el derecho de asilo en Grecia y Hungría, se ha producido un silencio mortal sobre las personas refugiadas en las fronteras exteriores, sobre las personas en tránsito entre fronteras internas, las y los invisibles que habitan en nuestras ciudades, en los CIES/CPR, en los CETI, en los campos de detención y en los campos de concentración libios.
“Se alzan barreras cada vez más altas e insidiosas en las fronteras del sur de Europa y se defienden como en el caso de Grecia, con gases lacrimógenos y devoluciones masivas en caliente con la bendición en directo de la Presidenta de la Comisión Europea y con el aplauso de los grandes medios de comunicación” lamenta la ONG.
Ahora la pandemia de la Covid-19 está facilitando la difusión de un nuevo estigma contra las personas migrantes y refugiadas que llegan de África y de Oriente Medio. En estos momentos a quienes huyen de la miseria y de las guerras, ya lleguen en pateras o sobrevivan aquí en condiciones inhumanas y con salarios de esclavitud, “se les acusa de propagar la pandemia y poner en peligro la vida de la gente nativa europea. Esta infamia cala con naturalidad y comienza a extenderse con rapidez entre sectores populares. Y Frontex contribuye intencionadamente a ello, anunciando con descaro la imposición de controles sanitarios sobre migrantes, pero no sobre turistas” apunta la Caravana.
Este verano, la UE trata de impulsar un Pacto Migratorio basado en un mayor blindaje de fronteras y una escalada en la expulsión de personas migrantes irregulares. La Caravana este año “no llevará sus cuerpos a donde hubiera querido, a lugares donde desaparecen las vidas de otras personas, en la muerte y la invisibilidad. Nuestros cuerpos de interposición no estarán en Ceuta, en Lesbos, en Bihac” lamentan.
‘LA VERGÜENZA DE EUROPA’
La Vorágine aborda esta realidad en su nuevo texto (in)surgente, un libro duro, necesario y con voces poderosas. ‘La vergüenza de Europa. Diarios desde el campo de concentración de Quíos’ ha sido redactado de forma colectiva por Angeles Cabria, Amaia Dra Simplifica, Amalia Gomez y Noemi Morral, y se encuentra disponible en su web, con un precio de 10 euros.
La Europa del siglo XX contienen campos de concentración en su territorio, con Grecia e Italia como “zonas cero de esa barbarie”, y financia campos fuera de sus fronteras, en lugares como Turquía, Libia o Níger, “que sepamos”.
Estos diarios personales desde el campo de concentración de Vial, en la isla griega de Quíos, son el testimonio de la barbarie europea, de unas sociedades y unos gobiernos en los que la política “post-Auschwitz” no parece haber mudado las formas de segregar, animalizar y provocar sufrimiento “a las y los Otros”.
Este texto colectivo es fruto del compromiso de mujeres que entienden que los ‘papeles’ no son importantes, que la humanidad debería ser un valor defendido con radical militancia y que denuncian a un sistema violento en todos sus extremos: el legal, el administrativo, el policial, el cultural…
Angeles Cabria, Amaia Erraiz Fernández, Amalia Gómez Nadal son profesionales de salud de diversos orígenes y realidades. Las une ser europeas y blancas, y portar una mirada crítica sobre la realidad. Todas ellas han trabajado como voluntarias en el campo de Vial, en la isla de Quíos (Grecia).
Por su parte, Noemí Morral es poeta e ilustradora. Ha publicado los libros Camí de cavalls (2019, Voliana edicions), Finestra poètica a Essaouira, (2016, edicions de l’Albí), y Tornar (2018, Voliana edicions).