San Millán de la Cogolla es conocido por ser el municipio donde se escribieron las primeras palabras en castellano, concretamente en su Monasterio, considerado como la ‘Cuna de la Lengua’. Y en esa localidad de La Rioja es donde se ha celebrado la primera Conferencia de Presidentes después de que se levantase el Estado de Alarma. Cada domingo de esos largos meses de confinamiento, los presidentes autonómicos se reunían con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, de manera telemática. Esta vez ha sido presencial.

A última hora ha decidido participar el lehendakari, Íñigo Urkullu, por lo que el único ausente en la conferencia ha sido Quim Torra, el presidente de la Generalitat de Cataluña, aduciendo la situación sanitaria de su comunidad y la presencia del Rey Felipe VI en La Rioja como motivos para no desplazarse hasta allí.

Miguel Ángel Revilla, presidente de Cantabria, compareció ante los medios una vez concluido el evento para explicar lo que había sucedido en la reunión. Sus primeras palabras fueron: «poco que contar, al menos por mi parte».

El presidente cántabro pasó después a destacar que el acuerdo logrado en Europa, y que le reportará a España 140.000 millones de euros (poco más de la mitad a fondo perdido y el resto en créditos), no va a repartirse del mismo modo que el Fondo COVID del Gobierno de España, sino que «quien va a decidir cómo se reparte es el Gobierno de España». Apuntó que vio a un presidente «optimista y «sobrado», tanto por la evolución de la pandemia como por el acuerdo en la UE.

Las comunidades autónomas van a tener que presentar proyectos que puedan recibir financiación de ese fondo, y Revilla ha pedido «que se nos oriente para saber qué apartados se pueden incluir en esos proyectos», de manera que no se preparen cosas que vayan a tener el rechazo de entrada por parte del Gobierno central. Hasta octubre hay tiempo para poder enviar propuestas, ha añadido.

Revilla quiso recordar que «Cantabria salió muy mal parada» en el reparto del Fondo COVID, pero que al menos el futuro reparto de fondos europeos, que comenzarán a llegar «el año que viene», no se harán pensando en el volumen de población de los territorios, un aspecto por el que ha mantenido una «fuerte discusión» con el presidente de Andalucía, Juan Manuel Moreno.

«Los dos grandes ejes son la transición digital y la transición ecológica», ha asegurado el presidente, que ha puesto algunos ejemplos posibles a pregunta de los periodistas, como pueda ser la modernización industrial, especialmente si se sustituyen «fuentes de energía contaminantes», como es el caso de Solvay en Torrelavega, también proyectos de energía eólica o incluso rehabilitaciones de viviendas: «eso también puede encajar», ha dicho.

«Si Madrid no autoriza los proyectos, estamos perdidos», ha sentenciado Revilla, que pretende «poner en contacto a las consejerías con los ministerios» para trabajar ya en posibles propuestas que puedan prosperar y entrar debajo del paraguas de los fondos europeos, pero recalcando que

En esa misma línea, el jefe del Ejecutivo cántabro se refería al duro año que se está viviendo a causa de la pandemia de la COVID-19 y que afecta a todas las administraciones: «Las comunidades autónomas vamos a tener muchos problemas para cerrar el año, en el caso de Cantabria un agujero, entre lo que hemos dejado de percibir y lo que hemos invertido en el tema de la pandemia que se acercará a los 500 millones. El Gobierno central estará dispuesto a estudiar alguna fórmula para el día a día»

RECLAMAR EL IVA IMPAGADO EN LOS TRIBUNALES

Revilla insistió en las mismas reivindicaciones que le ha hecho al presidente del Gobierno en los últimos meses. Una de ellas son los 45 de millones que el Estado adeuda a Cantabria por el impago de la liquidación del IVA de 2017, pero subrayó que «las reivindicaciones no han tenido respuesta positiva».

“Me ha dicho que sí, que eso no lo van a pagar. Nosotros lo vamos a llevar a los tribunales, creo que vamos a presentar la demanda dentro de poco y esperamos obtener la misma sentencia que tuvimos con el tema de Valdecilla, aunque si en el tema de Valdecilla el precedente es que nos lo han recurrido, aquí supongo que harán lo mismo”, ha afirmado Revilla en referencia a otra de las peticiones de la región, el pago de la anualidad del año 2016 de las obras del Hospital Universitario, contienda sobre la que ya hay un pronunciamiento judicial favorable a los intereses cántabros que, sin embargo, el Gobierno de España ha decidido recurrir, lo que el presidente interpreta como una “hostilidad” hacia Cantabria.

“Es un truco de mal pagador. Sabiendo que lo vas a perder, cuanto más tarde pagues, mejor. Es ofensivo para Cantabria”, ha apostillado Revilla, que no ha ocultado su sorpresa por el “silencio” del resto de territorios en relación al impago del IVA.

Tampoco ha fructificado la reivindicación de liberar los 450 millones de euros de superávit que los ayuntamientos cántabros tienen bloqueados en cuentas corrientes y que el Estado no permite destinar, por ejemplo, a reactivar la economía. ¿Por qué? Según la repuesta de Pedro Sánchez a Miguel Ángel Revilla, porque supondría aumentar el déficit, aunque, para el presidente cántabro, aquí “el truco está en que el déficit del Estado español es el déficit de todos”.

En lo que sí estuvo de acuerdo Revilla con el presidente del Gobierno es en no dar marcha atrás con la desescalada, porque los datos no invitan a pensar en medidas tan restrictivas como las que se han producido en España desde el pasado mes de marzo. Además, dijo que «Sánchez está convencido de que a finales de año habrá vacuna», por lo que el horizonte para poder resolver la emergencia sanitaria podría no ser cuestión de mucho tiempo.