La pandemia dura ya largos meses, y son muchos los sectores y los negocios de los que hablamos por lo que están sufriendo. Lo hablamos en una información periodística, pero también lo hablamos cuando vamos a tomar un café a un bar, cuando tenemos una conversación telefónica con algún familiar o cuando nos encontramos con nuestro vecinos.

«La cultura está un poco como todo el mundo», dice Pati Domenech, que lidera, junto a María Vidal, el proyecto de Ábrego. Espacio teatral y compañía de teatro. Un referente cultural de Cantabria, porque resulta ser un proyecto que ha conseguido triunfar en muchos lugares del mundo, lo que le ha llevado también a establecer contacto con muchas personas vinculadas al mundo del espectáculo. Eso les ha ayudado a poder traer montajes escénicos de primer orden y tan exclusivos que sólo venían a España para actuar en esta pequeña sala de Oruña de Piélagos.

La colaboración es algo a poner en valor en momentos como este. Y la cultura, según Domenech, no puede ser menos. Andar cada uno por nuestro lado no nos garantiza ningún éxito. Sobre todo, si hablamos de proyectos de poco tamaño. Sin embargo, juntarse con otros y formar sinergias puede conducir a la supervivencia de una marca, una sala, una compañía o cualquier otro ente cultural.

El tema de colaborar y compartir, Domenech lo lleva más allá, en una entrevista concedida a EL FARADIO DE LA MAÑANA, en Arco FM. Se refiere al efecto nocivo que produce una excesiva individualización de las personas. El consumo cultural se ha centrado mucho, y más aún en un momento de confinamiento domiciliario o perimetral, en las grandes plataformas de televisión de pago, y no le parece que sea un camino saludable.

Poniendo a Netflix como ejemplo, como podrían ser otras, Domenech cree que ese tipo de cultura «es como la comida basura». Es decir, que se puede perder «el gusto por el buen cine», y preferir verlo en esta plataforma, aún siendo de peor calidad. Al final, es un «empobrecimiento» que se deja notar en la sociedad. Por eso tener una gran variedad de eventos culturales es algo tan importante para hacer crecer a una comunidad de individuos.

Desde La Teatrería de Ábrego prefieren apostar por acudir a espectáculos culturales, ya sean obras teatrales, exposiciones de pintura, visitar museos o ir a conciertos. No solamente porque contemplar algo in situ nos enriquece, sino que también se comparte con otras personas que están en el mismo sitio y disfrutando del mismo contenido. Es algo que le aporta valor a la experiencia.

Convencido de que «la pandemia pasará», Domenech no quiere apartar su vista del futuro, de los proyectos que sigue teniendo entre manos y que quiere seguir desarrollando. Es cierto que, esta misma semana, Ábrego ha decidido aplazar su programación hasta que la situación sanitaria y las restricciones vigentes permitan retomarla, pero en ningún caso se trata de decidir cancelaciones. Es sólo un parón temporal, como explican en un mensaje difundido en su página de Facebook.

«Quien no mira hacia el futuro está perdido», asevera este importante actor cultural de Cantabria. No sirve concentrarse en el pasado ni en el presente, sino que es mejor tener un proyecto vivo que vaya añadiendo iniciativas que lo renueven y revitalicen. Como pueden ser los ciclos que celebra cada año Ábrego, ‘Sólo tú’ o ‘Mujeres que cuentan’, –con el apoyo de la Consejería de Cultura– que da voz a las mujeres del teatro, las que son capaces de liderar, idear, montar o dirigir un espectáculo, además que manejarse en las tablas par expresar todo lo que un texto lleva dentro.