El límite de horario y la reducción de aforos se mantienen también hasta el 11 de diciembre
La prórroga ayer del toque de queda vigente en Cantabria hasta el día 11 de diciembre implica la prolongación automática de las medidas sanitarias actualmente en vigor, adoptadas el pasado 13 de noviembre, entre las que se encuentra el cierre de los establecimientos públicos a las 21:30 horas y la reducción de aforos en actividades culturales y sociales.
Así lo ha dado a conocer hoy la Consejería de Sanidad, que ha señalado que la Resolución publicada el pasado 13 de noviembre mantiene su eficacia mientras siga en vigor la limitación de circulación entre las 22:00 y las 6:00 horas para mantener la tendencia a la baja de los contagios por COVID-19. Además, ha anunciado la autorización del reparto de comida a domicilio en horario nocturno, según la licencia de actividad del establecimiento de hostelería.
La prórroga, publicada ayer en el Boletín Oficial de Cantabria (BOC), será de aplicación a partir de las 00:00 horas de mañana, sábado, día 28 de noviembre, y durante 14 días.
Las restricciones sanitarias en vigor implican el cierre de los establecimientos abiertos al público a las 21:30 horas, salvo los centros sanitarios, farmacias, residencias de servicios, urgencias veterinarias y gasolineras o estaciones de servicios.
El informe de Salud Pública en el que se apoya la medida, emitido con fecha de 25 de noviembre, refleja que Cantabria permanece en estos momentos en situación de “riesgo extremo” y, pese a que la incidencia acumulada a 7 y 14 días ha disminuido en los últimos días, los indicadores sanitarios de ocupación hospitalaria y ocupación UCI han registrado una evolución al alza.
Por este motivo, se propone prorrogar el toque de queda actual “con el objetivo de detener los contagios, evitar el aumento de los mismos, reducir la sobrecarga de la enfermedad y la mortalidad en la población y el colapso sanitario”.
Además, se certifica que el adelanto del inicio del toque de queda a las 22:00 horas establecido el pasado 14 de noviembre “está mostrando eficacia, ya que produce una disminución directa de los encuentros sociales y, por ende, de los contactos estrechos que se podrían producir”.
Finalmente, la norma deja abierta la posibilidad de prolongar nuevamente la restricción de movilidad nocturna transcurridos estos 14 días naturales o, por el contrario, “dejarse sin efecto en atención a la evolución epidemiológica”, si bien Salud Pública apunta al respecto que “no es epidemiológicamente realista esperar que el nivel de alerta pueda disminuir hasta nivel 2 en un plazo inferior al propuesto”.