‘Infancia Robada’, las otras pandemias que sufren los más olvidados
‘Infancia Robada’ es el título de esta segunda entrega (el pasado mes de noviembre ya se presentó la primera en la Biblioteca Central de Cantabria) en la que el reportero cántabro nos adentra en cuatro de las problemáticas que más impacto tienen sobre la infancia en el continente africano: el trabajo infantil, con una serie sobre los niños trabajadores de las minas de oro artesanales de Burkina Faso; la dificultad de acceso a una sanidad de garantías, con una historia sobre discapacidad y superstición; la erosión costera como consecuencia del cambio climático que arrasa todo lo que se encuentra a su paso; y la violencia extrema a la que se enfrentan los menores en su día a día en el África subsahariana, un retrato de superación y resiliencia ante el azote terrorista que ha elegido como objetivo de sus ataques a la educación, prohibiendo a los pequeños a asistir a la escuela para intentar mejorar sus condiciones futuras de vida.
Una gran nómina de epidemias, anónimas la mayor parte del tiempo para los medios de comunicación occidentales, que llevan décadas golpeando sin piedad a la niñez de esta olvidada región del planeta y a las que irremediablemente parece estar condenada. Graves pandemias que hacen, si cabe, aún más difícil la supervivencia en este áspero pedazo de corteza terrestre. Siempre las mismas pestes que se repiten una y otra vez, cual estribillo de canción. Plagas modernas que flagelan y arrasan todo lo que se pone por delante: hambre, enfermedad, pobreza, cambio climático, educación, violencia, trabajo infantil… muerte.
Antonio ha pasado la mayor parte de su vida recorriendo algunas de las aldeas más desfavorecidas del planeta. Documentando y fotografiando sus gentes y las problemáticas en las que viven inmersos. En África, casi siempre en su querida África. Perennemente comprometido con cuestiones relacionadas con la conservación, la salud, la pobreza, la desaparición de culturas, la discriminación, la sostenibilidad y el medio ambiente.
Las series fotográficas que ahora se presentan en el Palacete del Embarcadero se han exhibido tan solo parcialmente en diferentes países, por lo que esta exposición, junto a la que ya ha tenido lugar con gran éxito en la Biblioteca Central de Cantabria y al libro que recogerá los trabajos de las dos muestras y que se presentará en próximas fechas, reunirá y mostrará por primera vez y de forma íntegra el proyecto «El Paraíso de los Corazones Olvidados» que el fotográfo viene desarrollando durante los últimos años de trabajo.
Una gran oportunidad para poder disfrutar, por fin reunidas en un mismo espacio, estas cuatro crónicas africanas que conforman ‘Infancia Robada’ y que el fotoperiodista ha realizado durante sus años de bagaje profesional.
Las imágenes estarán acompañadas con una selección de vídeos sobre temas relacionados con los niños y sus problemas en África, y de entrevistas en las que el autor nos contará sus experiencias, para que así los espectadores puedan disfrutar de un recorrido más amplio e inmersivo en la obra de este autor cántabro.
Una selección de reportajes que en los últimos años han sido acreedores de numerosos galardones internacionales (UNICEF Fotógrafo del Año, Picture of the Year Latam, International Digital Biennial Photojournalism, VOHH Photographer of the Year, Aphotoreporter, Life Press Photo, LondonBS,…), y han obtenido premios en algunos de los festivales de fotoperiodismo más relevantes del mundo, como el Xposure Photography Festival (Emiratos Árabes), Festival de Fotoperiodismo de Eslovenia, ZOOM Photo Festival (Canadá), DongGang Photo Festival (Corea), Direct Look (Rusia), Indian Photo Festival (India), PhotoVisa (Rusia), etc., y que ya han sido parcialmente expuestas en salas y museos de Emiratos Árabes, Polonia, Ucrania, China, Italia, República Checa, Rusia, India, Corea, Alemania, Bangladesh, Reino Unido, España y Canadá, entre otros.
«El Paraíso de los Corazones Olvidados» es un proyecto global sobre el trabajo de Antonio Aragón que, bajo la coordinación y comisariado del gestor cultural y editor Raúl Reyes, se viene desarrollando durante los últimos meses en Santander gracias al apoyo institucional de la Autoridad Portuaria de Santander, a través de su programa de apoyo a la cultura, y la Vicepresidencia del Gobierno de Cantabria, por medio de su Dirección General de Acción Cultural, que han hecho posible esta retrospectiva sobre su obra y con la que se pretende rendir homenaje a este multipremiado fotógrafo documental cántabro.
Más de dos décadas de aventuras, viajes, relatos e imágenes que impactan la retina y la conciencia, y que ahora —después de una exhaustiva selección entre sus historias realizadas en los últimos años— tenemos la oportunidad de contemplar tras más de 20 años de ausencia expositiva de este gran fotógrafo en la ciudad que le vio nacer.