El Conceju Local de Cantabristas Santander, en la propuesta integral para el desarrollo de la capital cántabra que ha presentado esta semana, ha propuesto la creación de una zona de tráfico restringida en el centro de Santander, para mejorar la calidad del aire, reducir los niveles de contaminación y contribuir a la lucha contra el cambio climático y la protección del medio ambiente.

Con el objetivo de “avanzar hacia un modelo de ciudad verde y atlántico”, la agrupación municipal de Cantabristas en la capital considera acompañar esta regulación con una red de carriles bici segura, un sistema de transporte ecológico que vertebre toda la ciudad, la implementación de aparcamientos disuasorios y la instalación de superficie arbórea urbana.

Además, desde el partido consideran que es importante “evitar que estas medidas se lleven a cabo de forma elitista y siguiendo a criterios estéticos o que favorezcan a las zonas más confortables de la ciudad, en lugar de atendiendo a razones medioambientales, saludables y de movilidad”. Desde Cantabristas Santander han afirmado que, además, “la ciudadanía de la capital cántabra tiene derecho a disfrutar de la naturaleza autóctona y a vivir en un entorno saludable, así como a disponer de espacios naturales para el esparcimiento y el ocio en todos los barrios”.

Por eso, plantean “abandonar la falsa asociación que tiene el Ayuntamiento de Santander de la modernidad con el asfalto y las palmeras”, desplazando su visión de la naturaleza como algo “caro de mantener”, por una perspectiva cercana a los grandes parques europeos y norteamericanos, en los que incluso se convive con fauna.

La estrategia verde y de sostenibilidad del Conceju de Cantabristas Santander también plantea la creación de un corredor verde a partir del terreno que resulte del soterramiento de los espacios ferroviarios de Castilla-Hermida, que vaya desde las Estaciones de Santander, pasando por Cajo y la Remonta, hasta enlazar con Camargo y Astillero.

Además, considera especialmente importante la protección específica del entorno, actividades económicas específicas y valores identitarios de las áreas de reflexión que planteaba el Ayuntamiento de Santander durante el proceso participativo para la elaboración del próximo PGOU. En su opinión, son “espacios naturales de gran valor paisajístico y medioambiental que deben preservarse de las políticas del hormigón y la especulación urbanística que caracterizan el modelo del PP”.