El Grupo Socialista en el Ayuntamiento de Santander reclama la copia completa del convenio de colaboración suscrito con Mouro Producciones, S.L.U. para la realización del ciclo de conciertos Magdalena Deluxe en la Campa de La Magdalena y que se aprobó, fuera del orden del día, en la Junta de Gobierno Local del pasado 21 de junio.

Según el portavoz municipal, Daniel Fernández, “el Partido Popular, que dijo en su momento que no le temblaría el pulso hasta que se depuraran responsabilidades, ha guardado las apariencias un tiempo prudencial, pero ha aprovechado la pandemia para volver a contratar los responsables de la empresa que ejecutó las obras del edificio que colapsó en la calle Sol 57”.

Daniel Fernández

Y es que Mouro Producciones es, junto a JyP Cantabria Ingenieros, una de las dos sociedades que conformaban la promotora Dos Imanes, que fue la encargada de efectuar las obras en el local Masters de la calle Sol 57 y que colapsó por un exceso en los trabajos de reforma en julio del 2017.

Después de las irregularidades descubiertas tras el siniestro y el expediente municipal abierto, se impuso la prohibición de que Dos Imanes contratara con la administración municipal durante cuatro años. Prohibición que, no obstante, se ceñía únicamente a la empresa responsable de las obras (Dos Imanes), pero que no que afectaba a las sociedades o a los responsables que la conformaban.

Así, el Consistorio ha seguido contratando con JyP Cantabria Ingenieros y Mouro Producciones, según asegura el portavoz socialista.

“La transparencia es un requisito imprescindible en democracia”

“La transparencia es un requisito imprescindible en democracia”, por lo que considera curioso que durante el estado de alarma se haya vuelto a contratar con los empresarios implicados en el derrumbe del edificio de la calle Sol 57; “un asunto escandaloso y por el que aún no se han depurado responsabilidades políticas”, ha apuntado.

Fernández ha recordado que el desastre que aconteció hace casi cuatro años (el 19 de julio de 2017) fue un cúmulo de despropósitos o “una gran confusión” entre los diferentes departamentos, como se desprende literalmente de la sentencia del Contencioso-Administrativo 1, que apuntaba a que la arquitecta municipal intentó paralizar las obras, sin ningún éxito.

Y es que, mientras se sucedían las irregularidades, denuncia Fernández, los promotores obtuvieron la licencia de obra mayor, “concedida de manera exprés y en menos de una semana”. Una licencia que se pidió por unas obras con importe de 30.000 euros, mientras se comunicaba que se haría una rehabilitación por importe de 200.000.

Asimismo, ha recalcado que con todo el “enredo” que se fue descubriendo y por el que la Fiscalía solicitó a la Audiencia Nacional que siguiera investigando por lo penal por un posible tráfico de influencias en la concesión de la licencia, “el PP guardó las apariencias y estuvo sin contratar con los implicados durante un corto periodo de tiempo”.

Sin embargo, ha señalado, que cuando en diciembre de 2020 se solicitó, a través de una moción, que se publicara la relación de contratos menores efectuados por parte del Consistorio, se descubrió que habían vuelto a adjudicar contratos menores a una de las sociedades implicadas.

Porque, según ha enfatizado, “y aunque en el PP dijeron que no les temblaría el pulso hasta que se depuraran responsabilidades, lo que no les ha temblado es el dedo para volver a adjudicarles contratos menores, bien en medio del estado de alarma, o incluyendo fuera del orden del día de la Junta de Gobierno previa al Pleno de Junio el convenio con Mouro Producciones para los conciertos en la Campa de La Magdalena”.

Adjudicados contratos menores por 17.883 y por 15.790 euros

En esta línea, el 7 de abril de 2020, en pleno estado de alarma, el equipo de Gobierno adjudicó a JyP Cantabria Ingenieros SL la redacción del proyecto de mejora de movilidad entre la calle Jesús de Monasterio y la calle Juan XXIII por 17.883 euros, y el 22 de junio de 2020 les adjudicaron por 15.790 euros la redacción del proyecto de acondicionamiento y pavimentación de la calle Valdenoja e intersección con la Avda. del Faro.

Para el responsable de los socialistas en el Ayuntamiento de Santander no debe olvidarse que a raíz del derrumbe el Sol 57 se descubrió documentación que permitió comprobar la celeridad con la que se produjeron algunos de los trámites solicitados por los promotores de la obra, la empresa Dos Imanes: la licencia mayor que necesitaban para unos trabajos ejecutados inicialmente con licencia menor fue tramitada en cuestión de días, hasta el extremo de que la propia Policía no tenía constancia cuando acudió a detener unos trabajo por unas denuncias previas de los vecinos. Unas obras que nunca se paralizaron, pese a que había una orden expresa, ha concluido.