La red juvenil de Izquierda Unida Cantabria ha previsto para el mes de febrero dos eventos centrados en la salud sexual, un tema “muy desconocido” para mucha gente, “pero imprescindible para tener relaciones interpersonales sanas y crear sociedades igualitarias, tolerantes y libres de prejuicios y estigmatización”.

Tras el 14 de febrero, Día Europeo de la Salud Sexual, la juventud de IU organiza la charla ‘Salud sexual. Rompiendo el tabú’ el jueves 24, a las 18:30 horas, en el salón de actos de CCOO de Torrelavega (c/Ansar, 5).
Carmen Martín, coordinadora de la Asociación Ciudadana Cántabra Antisida (ACCAS) y miembro de la junta directiva de la Red Cántabra de Lucha contra la pobreza y la exclusión social (EAPN-Cantabria) será la encargada de la ponencia, a la cual le seguirá un posterior coloquio con la participación del público.

Por otro lado, el lunes 28, a las 19 horas, se proyectará la segunda de las películas previstas en la filmoteca que IU realiza todos los primeros lunes de cada mes en el bar Rvbicón (c/Sol 4, Santander). En esta ocasión y puesto el foco en la salud sexual, ‘Verano 1993’, de la directora Carla Simón, recientemente galardonada con el Oso de Oro en la Berlinale por su segunda película ‘Alcarràs’, es la opción escogida.

El primer film de Simón habla de Frida, una niña que vive cambios y pérdidas demasiado temprano y que aprenderá a crecer con dos exposiciones, una adultez prematura y un estigma heredado que le persigue aun cambiando de casa, de familia y de vida.

“Es importante que hablemos de todo, de nuestros cuerpos y mentes, del sexo y todas sus implicaciones, como la salud, desde la normalidad del día a día y con las preguntas y dudas que cualquier persona pueda tener, desde la juventud a la edad adulta”, afirma Natalia San Emeterio, coportavoz de la red juvenil.

De hecho, la Organización Mundial de la Salud indica que “la salud sexual es un aspecto fundamental para la salud y el bienestar generales de las personas, las parejas y las familias, así como para el desarrollo económico y social de las comunidades y los países”. En este sentido, “requiere un enfoque positivo y respetuoso de la sexualidad y las relaciones sexuales, así como la posibilidad de tener experiencias sexuales placenteras y seguras, sin coerción, discriminación ni violencia”.

La OMS advierte de la importancia de tener información de calidad, atención a la salud sexual y un entorno favorable para evitar problemas relacionados con la orientación sexual o la identidad de género o consecuencias negativas como infecciones, embarazos no deseados o extremos como la violencia sexual.