Los artistas del Atelier Sierrallana visitan en la Biblioteca Central la exposición ‘¡Toc! ¡Toc! 50 años de álbum ilustrado’
Ángeles Adán, Pablo Berodia Ángeles Cobo, Asun Palencia y y Manuel Salado son los cinco artistas que han visitado este lunes la muestra ¡Toc! ¡Toc! 50 años de Álbum Ilustrado que se expone en la Biblioteca Central de Cantabria.
Son los integrantes del Atelier Sierrallana, una iniciativa puesta en marcha en el año 2016 dentro del Centro de Atención a la Dependencia de Sierrallana cuando, tras un tiempo trabajando en el centro, Jamaica Fernández, integradora social licenciada en Bellas Artes, descubrió que varias de las personas que vivían allí estaban dotadas de ciertas aptitudes y capacidades artísticas, como han demostrado a lo largo de los años.
Cada uno tiene su propio estilo que ha ido desarrollando con el apoyo de Jamaica Fernández y Amelia Ortiz que son quienes se han acercado con ellos hasta Santander para disfrutar de una exposición en la que han podido repasar la historia del álbum ilustrado en nuestro país.
Si bien las visitas a galerías de arte forman parte de la actividad del Atelier, en esta ocasión el hecho de poder interactuar con los elementos, hojeando la mayor parte de los álbumes expuestos y abriendo las pequeñas cajas con puertas para descubrir lo que escondían en su interior ha permitido que estos artistas hayan disfrutado especialmente de la visita.
MANUEL SALADO
Al igual que cada uno tiene un estilo personal, en el recorrido por la muestra, cada artista se ha interesado por un aspecto diferente.
Manuel Salado, cuyo trabajo precisamente acaba de ser elegido por el Colegio de Trabajadores Sociales de Cantabria para ilustrar su agenda, ha dedicado casi todo el tiempo a observar detenidamente algunos álbumes, fijándose en todos los detalles que aparecían entre sus páginas. Ahora mismo Manuel está trabajando en una colección, de la que forman parte los dibujos de esa agenda, y que lleva por nombre ‘Humano, demasiado humano’. Se trata de representaciones de distintas personas que algún día formarán un gran mural en su conjunto. «A Manuel le encantan los libros, las ilustraciones y suele coger fijación con algunas imágenes que le impactan. Nosotros tenemos bastantes libros de arte y él suele parar en las obras que más le gustan», explica Jamaica.
ASUN PALENCIA
Asun Palencia, que en su obra personal usa el círculo como elemento modular y es rítmica y repetitiva con diferentes grados de intensidad, suele ir acompañada siempre de un peluche, por lo que ha quedado entusiasmada al abrir las cajas y descubrir a todos esos muñecos que protagonizan algunos de los cuentos que forman parte de la muestra ¡Toc! ¡Toc! 50 años de Álbum Ilustrado. Asun incluso ha prescindido de su silla en algunos momentos para poder acercarse mejor hacia elementos que han llamado su atención: «esta exposición nos parece muy interesante porque además hay unas iconografías muy diversas y seguro que nos inspiramos un poco en esta fantástica colección de ilustraciones que acabamos de ver y que nos ha parecido fantástica», añade Jamaica.
ÁNGELES COBO
Ángeles Cobo ha disfrutado descubriendo a todos los protagonistas de los álbumes. Desde el Grúfalo hasta el Monstruo de colores o el Muñeco de nieve, encontrando que todos tenían similitud con Jamaica y riéndose de sus propias ocurrencias. Ángeles es una artista que manifiesta habilidad para registrar a través del dibujo sus ideas y sentimientos con claridad en sus formas y cuyo uso del color se basa en improvisaciones de apariencia misteriosa, llenas de color y ritmo. En su visita a la exposición ha hojeado un montón de libros y se ha divertido con el personaje de la cerdita Olivia que sueña con ser bailarina algún día.
ÁNGELES ADÁN
Ángeles Adán en su recorrido por la exposición parece haberse sentido atraída, entre otros elementos, por un libro cuyo título puede perfectamente hablar sobre ella. Soy un artista, de Marta Altés es uno de los álbumes seleccionado para esta exposición. Al protagonista de Soy un artista le encantan los colores, las formas, las texturas y todo lo que le inspira, algo parecido a lo que le sucede a esta artista del Atelier Sierrallana que acostumbra a utilizar el círculo como elemento modular y cuyos tiempos en el proceso y desarrollo de su obra dependen mucho de su estado de ánimo.
PABLO BERODIA
Pablo Berodia, artista incansable que pinta y dibuja con gran placer y que siempre encuentra un momento a lo largo del día para crear, ha curioseado todo lo que ha llamado su atención en la exposición y ha mirado con atención la colección de álbumes pop up que forman parte de la muestra. Con su carácter extrovertido alegre y muy comunicativo, es plenamente consciente de su ser como artista y ha querido posar en el photocall junto al tigre que Judith Ker creó hace más de 50 años.
EL ATELIER SIERRALLANA
El Atelier Sierrallana se fundamenta en la filosofía que desarrollaron en 1990 Elías y Florece Ludins-Katz en su manual (Art and Disability) para el desarrollo de un centro de artes plásticas y visuales para artistas con discapacidad intelectual, el Creative Growth Art Center de Oakland. La autoexpresividad creativa, que estos autores definen como «la manifestación externa en forma de arte de lo que uno siente en su interior y que permite al ser humano trascenderse y trascender su ambiente» es parte esencial de este proyecto.
Por eso, las coordinadoras del proyecto consideran que deberíamos contemplar estas obras con la misma emoción abstracta que podemos experimentar al escuchar una pieza de música o con la misma emoción que nos proporciona la mirada hacia la naturaleza. «Deberíamos considerar a los autores del Atelier Sierrallana como artistas de pleno derecho». Esa es su reivindicación.
Puedes seguir la actividad de los artistas del Atelier Sierrallana aquí