El Puerto que se iba a la ruina, la “casa de tócame Roque”, prevé sumar un millón de toneladas con la nueva terminal de Boluda
Uno diría que entre las personas que más saben donde está el dinero o cuidan de sus inversiones un perfil muy específico sería el de los presidentes del Real Madrid.
Uno de ellos, Vicente Boluda, anunciaba hace meses que invertiría en una nueva terminal para el Puerto de Santander.
Lo hacía mientras distintos dirigentes, tanto del Puerto como de las élites políticas o empresariales cántabras, y todo aquel que se empeñara en amplificar su argumentario, se convertían en los peores comerciales de unas instalaciones a las que describían como un “coladero”, “la casa de Tócame Roque”, un “campo de trabajo de las mafias” en el que “todo el mundo entraba como Pedro por su casa”, de forma que se iban a acabar marchando de aquí compañías tan señeras como Britanny Ferries.
Todo por, lo recordaréis porque centró espacios de opinión y debate durante meses, aquella extraña paradoja: con una mano, reivindicaban el poderío del Puerto de Santander, todo un motor económico de la comunidad, y, con la otra, tan débil que no iba a resistir los intentos de acceso de los jóvenes migrantes, calificados de polizones sin conseguir embarcar, acusados de provocar unos daños que nadie denunciaba y a los que se quiso disuadir apelando a un único modo, las cuchillas, para acabar encontrando otros que no eran el único que se veía: el refuerzo de seguridad, los drones…, vamos, lo que hacían otros puertos con más tráfico y medidas de seguridad más intensas para las instalaciones, menos drásticas para las personas.
Las predicciones, simple y llanamente, no se cumplieron: Brittany Ferries no se fue y hace poco sumaba nuevo barco, y este jueves veía la luz la nueva terminal de Boluda, lo que servía para que las instituciones defendieran el futuro del Puerto apelando a La Pasiega.
La instalación de Boluda que va a suponer una inversión de cerca de 30 millones de euros (20 en la ejecución de la obra y el resto a lo largo de la concesión) y que, según ha explicado el presidente Revilla, incrementará el tráfico portuario en un millón de toneladas anuales y permitirá al Puerto de Santander superar, “probablemente” este mismo año, el récord histórico de 6,7 millones del año 2021, además de facilitara los empresarios ahorros de 750 euros por contenedor en comparación con otros puertos.
Así, se esperan los 6,7 millones de toneladas récord del año 2021, con lo que los 3.510 millones de euros de nuestro comercio exterior quedarán como una referencia.
La nueva terminal de contenedores, denominada Boluda Maritime Terminals Santander, ocupa una superficie de aproximadamente 67.000 metros cuadrados y cuenta con una línea de atraque de 472 metros, destaca por sostenibilidad yeficiencia medioambiental.
El compromiso de Boluda Maritime Terminals Santander es poder mantener un tráfico mínimo anual de importación y exportación de mercancías de, al menos, 35.000 TEUs (unidad de medida de transporte marítimo) durante los cinco primeros años de la concesión y, a partir de dicho año, de 44.823 TEUs anuales.
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