Los trabajadores del transporte sanitario programado se plantean ir a la huelga
Los delegados de personal del Comité de Empresa de Ambuibérica por CSIF-Cantabria, sindicato más representativo en las administraciones públicas y con presencia creciente en el sector privado, advierten que, de no solucionarse la adjudicación del servicio de transporte sanitario terrestre programado del Servicio Cántabro de Salud, los trabajadores estarían planteándose la huelga.
José Alberto Ibarguen y Gildo Cabañeros, delegados de personal de Ambuibérica de CSIF Cantabria, señalan que, a pesar de la reciente adjudicación del servicio urgente de transporte sanitario de Cantabria a Autransa, nueva marca de Ambuibérica, el concurso de ambulancias para el transporte programado ha quedado desierto y muestran su preocupación por la resolución del mismo ya que sitúa a los trabajadores del servicio programado en una posición de desigualdad respecto a sus compañeros del servicio de urgencias.
Y es que, tras la entrada en vigor del nuevo convenio, válido por cinco años, en enero de este mismo año, las tablas salariales -que contemplan una subida media en torno al 17% con un aumento del 3,5% el primer año, un 3% extra el siguiente, un 2,5% más el tercero, un 3,1% el cuarto y otro 3,1% el quinto y último ejercicio- quedaban condicionadas a la adjudicación del transporte sanitario en la comunidad autónoma. Por este motivo, mientras los trabajadores del servicio de urgencias verán aplicada la subida salarial en la siguiente nómina, los del servicio programado se ven obligados a esperar que su servicio vuelva a salir a licitación y se resuelva favorablemente.
Cabañeros incide en la gravedad de un hecho que podría haberse evitado y que ellos mismos señalaron como inviable ante el Servicio Cántabro de Salud. En una reunión con Iñaki Lapuente, gerente de atención primaria, Ibarguen y Cabañeros ya expusieron que el presupuesto destinado para su dotación -13,2 millones de euros de los 46,9 totales- era muy bajo y poco realista, motivo por el que se presentó una única empresa, SSG, que, finalmente, no lo ha conseguido por no cumplir las condiciones del pliego y ser excluida por parte de la mesa de contratación y dejando el transporte programado desierto hasta próximas actuaciones.