Santatipo preservará el rótulo original del último videoclub de Cantabria
Después de 24 años en activo, y ser un referente y dinamizador cultural en Puente San Miguel, el “Video Club Puente” cerró sus puertas. Julián, su último propietario, se puso en contacto con la Asociación para donar el que es el rótulo original del comercio. Una pieza de más de 2 metros con la tipografía realizada en neón.
Abierto en 1999 por Óscar, y más tarde con la entrada de Ave y Pedro llegan hasta 2016 a pesar del auge de la piratería. Es en ese momento, con Julián al mando y dada la dificultad de recibir nuevas películas, cuando el videoclub, aparte de seguir alquilando películas, abre un espacio cultural habilitando una sala de cine de 13 butacas, así como un kiosko de snacks, donde ofrecer cine al municipio.
A pesar de la aparición de las Plataformas Digitales, siguieron aumentando el volumen de alquileres mensuales y convirtiéndose en un foco cultural y social, dado por su trato cercano y personalizado para conocer el séptimo arte. Pero es con la llegada de la pandemia en 2020 cuando se produce un declive de los alquileres llegando al 85% y cuando ya se toma la decisión de cerrar el que se ha conocido como “el último videoclub de Cantabria” por ser el único que seguía actualizando el catálogo de novedades hasta la fecha.
A lo largo de estos últimos años fue un rara avis en la región y a nivel nacional, como se recoge en las diferentes entrevistas, y medios en los que apareció al ser de los últimos videoclubs tradicionales de España en activo tal como fue este.
RESCATES Y DONACIONES
Desde que en 2019 se produjese el primer rescate del proyecto, rescatando el rótulo de vidrio de “Las 3 M” de su desaparición, en un edificio hoy derribado en el Cabildo de Arriba, y más de 50 rótulos y carteles después, así como otros materiales gráficos como son las bolsas o la papelería comercial, disponen de un pequeño espacio en el que están almacenando todo este material gráfico para su preservación.
Entre los rótulos más icónicos que se conservan está el del Bar Gelín “El rey de las Rabas”, el de la centenaria “Perfumería Calderón” o de los últimos a incorporarse como es la Confitería “La Góndola”, o la “Mercería Canales”. Pero no se cierra a Santander sólo, también se conservan rótulos de Renedo o ahora de Puente San Miguel, por lo que también abren al resto de Cantabria su labor de preservación.
Es por ello que desde el proyecto, siguen trabajando en su rescate, pero llaman tanto a vecinos, comerciantes, profesionales del sector inmobiliario o arquitectos, para seguir conservando estos objetos y han habilitado un correo (rescates@santatipo.es) para poder coordinar tanto rescates como donaciones que se puedan depositar. O así como está ocurriendo actualmente, lo pueden hacer también a través de sus redes sociales donde reciben avisos.
Por otro lado y dado el volumen que se está adquiriendo con estos rescates y donaciones, han comenzado a buscar el poder tener un espacio más permanente en el que puedan comenzar a trabajar con los rótulos rescatados, y los que vayan llegando, en su limpieza, documentación y puesta en valor para crear el primer espacio vinculado al Patrimonio Gráfico de Cantabria, por lo que desde la asociación estarían encantados poder hablar con cualquier persona o alguna institución que les puedan ayudar o colaborar en este sentido en la búsqueda de este espacio.
SANTATIPO
Santatipo nace en 2014, como un proyecto personal de Federico Barrera, donde se comienza a divulgar el valor cultural y social de los rótulos de Santander, a medida que van desapareciendo de las calles, a través sus diseños, tipografías y con la recogida de la memoria local.
A punto de llegar al décimo aniversario el próximo año 2024, a parte de los rescates, el proyecto ha crecido en estos años convirtiéndose en un referente cultural y social, realizando la primera publicación sobre este tema en Cantabria en 2020 a través de una campaña de crowdfunding o participando en diversos foros de patrimonio y cultura, así como siendo miembro fundador de la “Red Ibérica en Defensa del Patrimonio Gráfico” que aúna más de 20 proyectos estatales y de portugal vinculados a la protección de los rótulos y la gráfica comercial.
Desde hace ya un par de años, con la incorporación de Javier Camín y Javier Pato, con el apoyo constante de otras personas, el proyecto se ha convertido recientemente en una Asociación Cultural con el objetivo de proteger ese legado tipográfico de nuestras calles y barrios. Entre sus objetivos actuales, aparte de seguir rescatando aquellos rótulos en riesgo, están poder seguir sensibilizando el valor de estos elementos, a través de su blog y redes sociales; pero también poder llevar a cabo acciones culturales y sociales vinculadas al diseño, la tipografía, la memoria local y el Patrimonio Gráfico, de cara al 10º aniversario.