El Comité de Empresa de Autransa, la nueva adjudicataria del servicio de transporte sanitario urgente de Cantabria, ha convocado mañana viernes, 10 de mayo, por la tarde una asamblea para que la plantilla, compuesta por alrededor de 300 personas, ratifique la huelga que han promovido ante los sistemáticos incumplimientos en materia de seguridad y salud y la reiterada vulneración de derechos que sufre cada día el personal.

El Comité de Empresa ha dicho basta ante una situación que se está haciendo insostenible ya que la empresa no reacciona a pesar de haber tenido que asumir múltiples sanciones por parte de la Inspección de Trabajo.

Para el Comité de Empresa, la gota que ha colmado el vaso han sido «las represalias y el injusto y desproporcionado castigo» aplicado a dos conductores que han sido sancionados con cinco días de empleo y sueldo tras sufrir dos accidentes fortuitos con las nuevas ambulancias.

CCOO, UGT, USO y CSIF han anunciado que mañana viernes decidirán en asamblea si van a la huelga y, en caso afirmativo, definir los detalles de la movilización y concretar las medidas a tomar.

“El servicio sólo se ha mantenido gracias al inmenso esfuerzo y profesionalismo de nuestro personal operativo. Unos trabajadores y trabajadoras que, tras las sanciones, están conduciendo con miedo porque lo único cierto es que no han tenido ni siquiera el periodo necesario de adaptación a los nuevos vehículos ni la formación adecuada para ello”, han subrayado desde el Comité, que ha afirmado que “el castigo, además de ser legalmente cuestionable, sólo tiene como objetivo intimidar y aumentar la presión sobre la plantilla”.

La situación se ha ido agravando desde que la Autransa se hizo con la concesión del servicio de transporte sanitario urgente y el Consejero de Salud, César Pascual y el gerente de Atención Primaria, Pablo Busca, ha decidido ignorar el problema y mirar hacia otro lado.

Así, el Comité de Empresa ha denunciado que tanto uno como otro han ignorado las diferentes solicitudes de reunión propuestas, demostrando un total y absoluto desinterés por las graves repercusiones que las deficiencias en el transporte sanitario tienen sobre la salud de la ciudadanía de Cantabria y dejando en evidencia que no quieren solucionarlo.

El Comité de Empresa ha señalado que existen continuos incumplimientos en lo que respecta al vestuario laboral y los Equipos de Protección Individual (EPIs), sin contar que la plantilla acusa cada día las condiciones de insalubridad en los centros.

Por último, el Comité de Empresa ha hecho hincapié en que seis meses después del inicio del concurso, valorado en 46 millones de euros, la Gerencia de Atención Primaria no ha asegurado el cumplimiento de las condiciones establecidas en el pliego y que siguen siendo los trabajadores y trabajadoras quiénes continúan notificando y denunciando los constantes incumplimientos.

“Parece que al Servicio Cántabro de Salud le da igual que sean los y las ciudadanas de Cantabria quiénes financien con su dinero este contrato porque siguen sin dar respuesta ni buscar soluciones a los problemas que se están originando y que cada día van a peor”, ha concluido al Comité, que ha animado a la plantilla a participar en la asamblea convocada mañana para definir los paros.