FLORA, el festival cántabro dedicado a los alimentos y las bebidas fermentadas, se celebró con éxito de público y participación el pasado fin de semana en el Mercado de Sarón (Santa María de Cayón). Este espacio fue el epicentro de reunión de expertos en la materia llegados de todo el país, productores especializados en este tipo de alimentos, ponentes y, por supuesto, visitantes. Estos últimos fueron casi dos mil, con más de trescientas personas apuntadas en los talleres y las catas que se ofrecieron el sábado y el domingo, además de un nutrido público que acudió a las ponencias dedicadas a conocer más y mejor el universo de la fermentación. Impulsado por La Lleldiría y financiado por SODERCAN, con la colaboración de Back to the Roots y Plan Be, a cargo de la producción, el festival se organizó en conjunto con el Grupo de Acción Local Valles Pasiegos y el Ayuntamiento de Santa María de Cayón, cuyos representantes estuvieron presentes en la inauguración.

En el escenario principal los protagonistas también fueron los alimentos y bebidas fermentados, enfocados desde diferentes disciplinas de conocimiento. En agenda, una parte del programa estuvo dedicada a las bebidas, en concreto a las cervezas de fermentación espontánea de la mano de Panos Alexandropoulos de Ummagumma beer. En este área también se trató el empleo de fermentados en la elaboración de cócteles, con el testimonio de Berto Díaz, copropietario y bartender de El Patio de Butacas (Pola de Siero), y se prestó atención a las bebidas fermentadas de baja graduación alcohólica (conocidas como “bebidas NoLo”), categoría que no para de crecer, con Iratxe Olazaran, responsable de diseño de alimentos de Leartiker, en Vizcaya.

La nutricionista Chloé Estandía (Back to the Roots) dio una charla magistra sobre cómo este tipo de alimentos ayudan a cuidar la salud a través del microbiota y, en el apartado de innovación, Eneko Izkue, profesor en el Basque Culinary Center trató el empleo de técnicas ancestrales de fermentación enfocadas a obtener nuevos resultados en cocina. Malen Sarasua de Esneki Zentroa, el centro lácteo de Euskadi, dedicó su ponencia al desarrollo de nuevos productos lácteos, grandes protagonistas entre los alimentos incluidos en FLORA.

Durante todo el fin de semana el mercado de productores, con puestos de producto cántabro y otros llegados de todo el país, estuvo copado de clientes interesados en la compra de productos fermentados: una gran variedad de quesos y vinos, cervezas artesanas, kombuchas, salsas y kimchis, vinagres o pan, entre otros, llenaron las cestas de quienes aprovecharon su visita para hacerse con sus favoritos. En paralelo, la “Zona Gastro” ofreció tapas y pinchos a cargo de Masha Terka y Oscar Obregón con una gran acogida, tanto para comer como para cenar, mientras tenían lugar los conciertos de 14 Cuerdas y Chebú (respectivamente). El domingo una comida popular fermentada a cargo de Antonio Vicente Gómez, más conocido como “Cantabria Power” logró el lleno total mientras el grupo de Danzas San Pedruco ponía el broche final al evento con su actuación.

Sobre Flora

FLORA surge con un enfoque innovador, con el objetivo de ser punto de encuentro de proyectos relacionados con los alimentos fermentados, tanto cántabros como provenientes de otros puntos del país. Esta apuesta por dar conocer todo lo que tienen que aportar, tanto los alimentos fermentados como quienes los producen y elaboran, busca potenciar la producción local incorporando técnicas ancestrales que fueron dejadas de lado y que se encuentran en pleno proceso de recuperación. Este formato que aúna mercado con actividades dirigidas (catas, talleres), ponencias y zona gastronómica con actuaciones es una forma perfecta de acercar al público local una visión amplia y muy completa de los productos fermentados, de sus procesos de elaboración y sus características organolépticas. Desde La Lleldiría, el proyecto afincado en Merilla (Cantabria) que toma su nombre precisamente del verbo cántabro “lleldar”, es decir, “fermentar”, han querido que los participantes en FLORA se encuentren alineados con sus propios principios y filosofía. Así, el foco de este festival se centra en reunir proyectos que, con su actividad, apoyan el desarrollo rural y reforzar el tejido social y económico en estas zonas.