«El Festival de Invierno es una manera de democratizar la cultura de Torrelavega»
Ya está en marcha, pero todavía queda un mes para disfrutar de los eventos que componen la programación de este año del Festival de Invierno de Torrelavega. Terminará el 22 de febrero y reúne nombres muy consolidados dentro del panorama teatral y cinematográfico español. Carlos Hipólito, Manuela Velasco, Elisa Mantilla, Carlos Sobera, Pepón Nieto o Alicia Borrachero son algunos de los nombres que forman parte del cartel.
Son 36 ediciones ya y eso hace que sea un evento referente a nivel nacional, como señala la concejala de Cultura del Ayuntamiento de Torrelavega, Esther Vélez, en una entrevista concedida a EL FARADIO. Y además se celebra en el Teatro Municipal Concha Espina, la joya cultural de la ciudad.
La venta de entradas va a un ritmo sensacional, pero la edil torrelaveguense destaca que, por la Ley de Espectáculos, se debe reservar el 10% de las entradas de cada espectáculo para la venta en taquilla el mismo día de su celebración, por lo que siempre queda ese oportunidad para quienes no han llegado a tiempo de comprar el ticket anticipadamente y se han quedado sin él.
También remarca Vélez que los precios son bastante asequibles. Se trata de un evento público y la idea es «democratizar la cultura de Torrelavega». Ella lo sentía así antes de tener responsabilidades políticas, y cree que esa debe seguir siendo una de las señas de identidad del Festival.
Otra característica importante es que todas las semanas hay espectáculos infantiles, lo que demuestra una voluntad de que el evento abarque a todo tipo de público, también a los más pequeños. Y se hace procurando que haya variedad y se expongan temáticas de tipo formativo, que tiene que ver con el fomento de la amistad o la protección del medio ambiente.
Al contar con un público «fiel y consolidado», el equipo de la Concejalía que se encarga de la organización del Festival trata de buscar obras de calidad, que estén de gira y que estén valoradas en distintos premios teatrales. Y no sólo se mira hacia espectáculos infantiles, que se suelen programar los domingos, sino que los viernes se piensa en contenidos adaptados a los jóvenes, incluyendo monólogos de humor. La comedia es un género que está muy demandado, aunque también se programan obras del género dramático y algunas obras de teatro clásico.
Supone un gran esfuerzo, continuado en el tiempo, organizar el Festival de Invierno. Una vez que termina, ya se empieza a pensar en el evento del año siguiente. Vélez dice que «es una gran responsabilidad, pero también es ilusionante». Por eso ensalza el trabajo de su equipo a la hora de elaborar la programación, porque son técnicos con experiencia y que «aman el trabajo que hacen». Y eso trasluce en el ‘feedback’ que reciben de las compañías y productoras que vienen de fuera, porque salen muy contentas del resultado cuando actúan en el Concha Espina. Y también está el ‘feedback’ del público, incluido el que viene de provincias limítrofes. Una señal de que es una iniciativas longeva y de mucho valor cultural.