Continúa el goteo semana de casos de agresiones sexuales que se produce cada semana en los juzgados cántabros.

La Sección Primera y Tercera de la Audiencia Provincial de Cantabria serán escenario la próxima semana de tres juicios por distintos delitos sexuales que incluyen corrupción de menores, agresión sexual y abuso sexual con penetración.

El primero será el martes en la Sección Primera de la Audiencia Provincial de Cantabria, por corrupción de menores.

Según el escrito de calificación de la fiscalía, los hechos ocurrieron en una calle de Reinosa, donde el acusado, «a sabiendas de que la víctima era menor de dieciséis años», se acercó a una niña de once años y le ofreció 20 euros «para estar un rato con él», con la intención de obtener un encuentro sexual.

La fiscalía solicitará una pena de tres años de prisión, cuatro años de prohibición de comunicarse o acercarse a la menor, seis años de inhabilitación para trabajar con menores y un año de libertad vigilada tras su salida de la cárcel.

Además, se pedirá una indemnización de 1.000 euros para la menor por los daños morales ocasionados.

Los otros dos juicios confirman la tendencia más habitual, la de que los ataques procedan de los entornos más cercanos:

Así, el miércoles la Sección Primera tendrá un juicio por agresión sexual en una residencia, en el que un hombre enfrenta cargos por agresión sexual en una residencia donde ambos, acusado y víctima, se encontraban ingresados.

Según la fiscalía, el acusado, tras fumar un cigarrillo con dos compañeras en el aseo, agredió a una de ellas cuando la otra abandonó el lugar.

El escrito de calificación detalla que el hombre, «movido por una evidente intención de satisfacción sexual», sujetó a la víctima por la barbilla para besarla, a lo que ella se negó. Acto seguido, realizó tocamientos de carácter íntimo. La mujer logró zafarse, pero el acusado la sujetó del cuello al intentar huir. Los gritos de la víctima alertaron a otros residentes, quienes acudieron en su ayuda.

El acusado, que padece un síndrome de dependencia a múltiples drogas y trastornos cognitivos, enfrenta una petición de cinco años de prisión, cinco años de inhabilitación para trabajar con menores y cinco años de libertad vigilada. La fiscalía también solicitará una indemnización de 3.000 euros para la víctima por los daños morales sufridos.

Finalmente, el jueves la Sección Tercera juzgará a un hombre por abuso sexual con penetración mientras una mujer dormía en su domicilio.

Según la fiscalía, el acusado aprovechó que la víctima dormía en una habitación contigua a la suya, tras haber pasado la noche con su compañero de piso, para introducirse desnudo en su cama y llegó a introducir el pene en su vagina. Ella inicialmente pensó que era su pareja, pero, al darse cuenta, se defendió y logró que él abandonara el domicilio.

La fiscalía calificará los hechos como un delito de abuso sexual con penetración y solicitará cinco años de prisión, ocho años de alejamiento y prohibición de comunicarse con la víctima, cinco años de libertad vigilada y quince años de inhabilitación para trabajar con menores. Además, pedirá una indemnización de 5.000 euros por los daños morales.

Por su parte, la acusación particular, ejercida por la víctima, elevará las peticiones a ocho años de prisión, diez años de alejamiento, quince años de inhabilitación y una indemnización de 10.000 euros.