Cantabristas ha pedido a la consejería de Cultura, Turismo y Deportes del Gobierno de Cantabria, responsable de esta “adjudicación a dedo”, que asuma responsabilidades tras la “desastrosa privatización” del Hotel La Corza Blanca y la cafetería de Alto Campoo.

Recientemente, los problemas en la gestión de estas instalaciones coparon numerosos titulares en los medios de comunicación con alertas sobre el “servicio caótico” y el “funcionamiento desastroso” tanto del hotel como de la cafetería.

A pesar de que el consejero Luis Martínez Abad ha explicado que “ha dado un toque de atención” a la empresa, para Cantabristas esto no es suficiente, dado que la adjudicación no siguió los trámites ordinarios -que serían un proceso de licitación ordinario de contrato de concesión de servicios-, sino que se tramitó a través de la figura del convenio de colaboración para “regalárselo a dedo”. Es decir, el Gobierno de Cantabria seleccionó con qué empresa quería trabajar-SNÖ Hotels- y privatizó el servicio para ella, por lo que, según recuerdan desde Cantabristas, “son plenamente responsables de lo que está ocurriendo en estas instalaciones de Alto Campoo”.

Desde la formación cantabrista consideran que este tipo de privatizaciones solo conllevan consecuencias negativas para el servicio, dado que, de los recursos antes destinados a las prestaciones para los usuarios, ahora hay que descontar el beneficio privado que la empresa se lleva. De hecho, gran parte del “caos” vivido estos días en Alto Campoo, “podría parecer apuntar a una plantilla excesivamente corta para los servicios que debían asumir, consecuencia directa de la pretensión de ahorro en recursos humanos por parte de la empresa adjudicataria”.