“Sorpresa” es la sensación que más repiten en la zona oriental de Cantabria tras conocerse las intenciones de Bosch de vender (que no cerrar) su fábrica de Treto, en la localidad de Bárcena de Cicero.

Sorpresa porque en un contexto de crisis generalizada en la industria la planta venía dando buenos resultados, al igual que todo el grupo, con beneficios a pesar de factores como la crisis o la competencia asiática.

(en 2014 la compañía incrementó sus ventas en un 7% y obtuvo beneficios por valor de 3.000 millones de euros; y en Europa, la zona con más dificultades por la dura competencia de mercados emergentes como Asia, su actividad creció, aunque algo menos, un 2%)

De hecho, la dirección se había planteado recientemente la contratación de 80 nuevos trabajadores ante estos buenos resultados, según ha expuesto el alcalde electo de Colindres, Javier Incera.

Fábrica de Robert Bosch en Treto

El futuro regidor, que aún no ha tomado posesión, ha explicado a los medios que ha contactado con personal y directivos de la fábrica, con los que se reunirán la semana próxima representantes de los ayuntamientos de la zona.

Y ha puesto como ejemplo que sólo en Colindres hay 400 empleados que trabajan en Bosch, de una población de 8.000 personas.

Incera ha incidido en las repercusiones que tendría cualquier problema laboral no sólo en la zona oriental, con unos trabajadores que mayoritariamente son de Colindres, Bárcena de Cicero o Laredo, sino en la dimensión regional de la fábrica

Los trabajadores de la fábrica han recibido este jueves el apoyo del presidente en funciones de Cantabria, Ignacio Diego.

El presidente de la patronal, Lorenzo Vidal de la Peña, ha hecho, durante su intervención en la tertulia de Buenas Tardes Cantabria, un llamamiento a la tranquilidad, incidiendo en que la fábrica sigue funcionando y que el anuncio de la venta no se traduce necesariamente en una destrucción de puestos de trabajo.

En concreto, lo que ha anunciado el grupo es que ha puesto a la venta la fábrica que tiene en Treto, Colindres, que cuenta con 700 puestos de trabajo de forma directa, pero que de forma indirecta supone más de 2.000 empleos.

Y sería o bien buscando un socio que se incorpore a la propiedad o bien con un nuevo propietario, todo dentro de una operación internacional que afecta a 13 fábricas y 6.500 trabajadores en todo el mundo.

En este sentido, Rafael Pérez Tezanos, diputado en funciones del PRC (ya no lo será la próxima legislatura) y vinculado al sector de la industria, ha explicado que las multinacionales suelen funcionar con una visión a largo plazo.

Por tanto, ha considerado que esta decisión se debe a criterios de planificación, a que están buscando una mejora en la productividad y una forma de producir más barata.