Formación y coordinación, prioridades en la lucha contra la violencia de género
La lucha contra la violencia de género es la principal prioridad que se ha marcado para su gestión la nueva directora general de la Mujer del Gobierno de Cantabria, Alicia Renedo.
“Vamos a poner toda la carne en el asador”, aseguraba, en declaraciones a EL FARADIO, tras expresar su preocupación por el incremento de crímenes machistas del último año y, en especial, este verano.
Un asunto que lleva años en la agenda de los movimientos sociales feministas, y que está creando fuerte alarma social, como prueba la alta asistencia a la última concentración de protesta, celebrada la pasada semana en la Plaza del Ayuntamiento de Santander.
Para ello quiere trabajar en varios campos, desde la formación y la sensibilización hasta la coordinación de todos los agentes implicados en la cadena de atención a las mujeres víctimas de violencia de género, como la policía o la judicatura.
Porque se ha detectado, en lugar de fallos puntuales, un fallo en “todo el conjunto”, como la coordinación, el ir “todos a una, desde la formación en igualdad desde edades tempranas hasta la colaboración con otros departamentos del propio Gobierno de Cantabria.
Por un lado, Renedo pide un incremento en las dotaciones para estas políticas del Gobierno central, y muestra su preocupación por los efectos de la nueva legislación para los ayuntamientos, que quedan sin competencias en determinadas materias, como la violencia de género.
Pero, por otro, añade que no todas las políticas afectan a medios económicos, y en ese sentido destaca la importancia de la formación y la coordinación.
Una de las apuestas es conseguir que las víctimas “no tengan miedo a denunciar” y que se sientan “protegidas” si así lo hacen y pueden denunciar sin miedo a las represalias del agresor.
El teléfono de atención a víctimas de violencia de género es el 016.
Es un teléfono gratuito que funciona las 24 horas del día, con atención personalizada, que deriva, si es necesario, a servicios de seguridad o a los profesionales correspondientes, y que no deja rastro ni en la marcación ni en la factura telefónica.