Liberbank, el banco del que forma parte la antigua Caja Cantabria, ha abierto una línea de crédito cuyo objetivo es ayudar a las familias…a consumir en navidades.

Un crédito “instantáneo” en su concesión (se puede solicitar desde el propio cajero automático), aunque puede tardar algo más en devolverse: hasta seis años, para un importe máximo de 15.000 euros.

Serán, en total, 2.480 millones de euros que tienen un mercado potencial de 229.600 clientes.

En concreto, la entidad ofrece préstamos de hasta 15.000 euros en condiciones de mercado que califica como “muy competitivas” –y que no termina de concretar-.

Se podrán contratar hasta el próximo día 31 de enero de 2014, y se plantean en un modelo flexible en cuanto a los plazos y el pago anticipado de la deuda que se contraiga.

Liberbank está formado por la unión de Caja Astur (que ya tenía a sus espaldas a la frustrada Caja Castilla La Mancha), Caja Extremadura y Caja Cantabria.

UN BANCO ESTRESADO

La entidad que preside el asturiano Manu Menéndez no pasa por su mejor momento: mientras última los preparativos para el test de estrés del Banco Central Europeo a la banca española, se cuestionan sus resultados y la Audiencia Nacional ha anulado los acuerdos laborales a los que había llegado con los sindicatos para evitar sus planes de eliminación de puestos de trabajo por la fusión.

Además, continúan las protestas de los afectados por las participaciones preferentes, mientras la Fiscalía mantiene abiertas dos investigaciones por los pagos irregulares de la entidad, a través de la filial Bancantabria y sin que, según se ha denunciado, consten trabajos a cambio, del marido de la secretaria general del PP y presidenta de Castilla La Mancha, Dolores de Cospedal; y el presidente del Consejo de Seguridad Nuclear, Fernando Martí.