Mientras se anuncia la firma de un acuerdo que supondrá la pacificación de Colombia, en Cantabria, la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP) tiene prevista una distinción a uno de los políticos que más se ha significado en contra de este proceso, el expresidente Álvaro Uribe.

En concreto, la entidad académica, dependiente del Ministerio de Educación, entregará el próximo 5 de julio su medalla de honor al expresidente colombiano Álvaro Uribe, en una distinción que fundamentan precisamente en su trayectoria en el campo de los derechos humanos y que así están presentando en Colombia medios afines a este político.

Álvaro Uribe

Es este un galardón que ha suscitado el rechazo de ciudadanos y colectivos sociales, articulado a través de la plataforma Libres o de una petición en Change.org que ha sumado más de 6.000 firmas.

Tras conocerse este rechazo a quienes sus críticos censuran por su política contra los derechos humanos y por la acumulación de procesos abiertos, el presidente cántabro Miguel Ángel Revilla anunció que no le recibiría y mostró su distanciamiento respecto a la Universidad Internacional Menéndez Pelayo.

Nuevos colectivos sociales se han ido sumando en los últimos días a este rechazo, que se plasmará en una protesta el mismo día, entre otras acciones que van alcanzando repercusión en todo el país.

El Colectivo de Colombianos en Asturias ha expresado su rechazo ante lo que definen como “un error que afrenta a decenas de miles de víctimas de violaciones muy graves de los Derechos Humanos” que “causaron el desplazamiento forzado de 2,8 millones de personas y la muerte de al menos 4.700 ejecutadas extrajudicialmente”, que están bajo el examen de la Corte Penal Internacional. El espionaje a activistas, incluso en España, es otra de las prácticas documentadas que le achaca este colectivo.

La lucha también ha saltado al plano institucional y al simbólico anuncio de Revilla se suma una acción más concreta que obligará a todos los partidos a ‘retratarse’: el concejal de Santander Sí Puede, Antonio Mantecón, propondrá al Pleno del Ayuntamiento que se declare a Uribe persona non grata en la ciudad –en una petición que ha tenido eco en medios de comunicación colombianos.

Viñeta del Paisá sobre la medalla

En la moción, que se llevará al próximo Pleno, también se pedirá que el Ayuntamiento no tenga representación institucional en el acto de entrega de la medalla al ex presidente de Colombia.

Según Susana Ruiz, Coordinadora general del Comité Ciudadano del partido municipalista, “el señor Uribe recogerá el premio, si el clamor social no es escuchado, con unas manos manchadas de sangre y droga. La misma sangre que regó los campos colombianos y la misma cocaína que ha inundado el país latinoamericano durante décadas. Estamos hartos de oír a partidos políticos hacer sangre de Venezuela y cerrar los ojos ante las barbaridades cometidas en países vecinos como Colombia. Esto no parece ser interesante en campaña electoral”.

Este partido recuerda que Uribe ha sido denominado por The Narco News, centro de investigación en materia de narcotráfico internacional, como uno de los precursores del “Narco-Estado colombiano”. Autoridades como el exvicepresidente de Estados Unidos Al Gore han rechazado en el pasado acudir a actos en los que estaba invitado Uribe.