|| Eduardo San José, politólogo ||

Siempre que hay elecciones, una vez que estas se producen, tendemos a comprobar lo que se denomina “el acierto o no” de las encuestas. Ver cuadro adjunto.

Me gustaría matizar que las encuestas no son instrumentos de predicción de comportamiento político futuro, sino herramientas de análisis del momento en que se realizan. Es decir, no fracasan en sus previsiones ya que no hacen previsiones. De hecho, si están bien hechas técnicamente, todas las encuestas son correctas.

Sin embargo de un tiempo a esta parte, los medios de comunicación como grandes clientes de las encuestadoras, no son lo suficientemente claros a la hora de presentar los datos de las mismas, resultando que los datos obtenidos se convierten en un momento por arte de magia en previsiones de resultados electorales y, por consiguiente, en diana de las correspondientes críticas cuando éstas no se cumplen.

Fuente: eldiario.es

Respecto a los resultados electorales del pasado 26 de Junio, y tras ver la coincidencia existente entre las encuestas realizadas desde el 4 de Mayo al 19 de Junio, no queda más que preguntarse qué ha sucedido entre el 19 y el 26 de Junio que pudiera haber modificado lo que parecía ser una tendencia predominante en todas las encuestas, me refiero al sorpaso de UP sobre el PSOE. Y la respuesta nos llega de manos del resultado de las elecciones del 23 de Junio en Gran Bretaña.

Cuando en una campaña electoral irrumpen datos, sucesos o noticias de especial relevancia social, puede haber un cambio brusco e impredecible de los resultados electorales. Un ejemplo reciente en España sería el triste 14M de 2004. Habrá que esperar a conocer datos de estudios post-electorales que confirmen o desmientan esa hipótesis.

Debemos tener en cuenta también, un aspecto que adquiere cada vez más relevancia, y que no es otro que la proliferación de publicaciones de sondeos electorales en todos los medios. Cada vez más, los medios de comunicación publican estudios que acaban siendo la noticia del día de ese mismo medio. Es decir, los sondeos electorales como noticia relevante en la agenda del día, provocando que los resultados lleguen a cada vez más personas.

Sería interesante y necesario evaluar si esta publicación de datos de sondeos electorales no estaría provocando en sí misma un cambio de comportamiento electoral, al dar como realidad lo que sólo es una proyección en el momento de realización de la encuesta. Es decir, si la publicación de una encuesta electoral, o en el caso actual de casi 20 encuestas, no son en sí mismas responsables de comportamiento electoral del votante. De hecho, algún líder dijo en campaña que “vamos a luchar contra las encuestas”.

Por último, los profesionales que nos dedicamos a esto, debemos reflexionar de manera profunda en nuestra metodología de trabajo, entonar un mea culpa, y tratar de mantener en tiempos en los que los plazos de entrega, el precio, etc, pudieran hacer peligrar una profesionalidad y buen hacer que sin duda es nuestro principal interés.

Pongamos un poco de sensatez en todo este debate, las cosas en su sitio y las encuestas donde deben estar: analizando el momento social y político de cuando se realizan.

Por cierto, nuestro sondeo es de los mejor posicionados del ranking.

SyM Consulting @barometrocm