El patio de las Escuelas Verdes que peligra.

El Concejo Abierto de Santander ha manifestado en su última reunión su «total apoyo» a la propuesta de uso del patio del Centro de Educación de Adultos (antiguas Escuelas Verdes) elaborada por los vecinos de Antonio Cabezón y Francisco Giner en la zona de Entrehuertas, que se oponen a los planes del Ayuntamiento para  la construcción de un vial de «dudosa justificación».

En un comunicado, el Concejo Abierto ha explicado que suscribe la alternativa presentada por los vecinos para hacer huertos y una pequeña zona verde de esparcimiento y descanso, en un barrio «enormemente abigarrado de viviendas y carente por completo de espacios libres».

El Concejo Abierto de Santander es un colectivo de colectivos, en el que participan la Plataforma en Defensa de la Bahía (DEBA), junto con grupos como ARCA, Ecologistas en Acción, Cantabria Nuestra, Tajamar o Amigos del Casetón.

También están representadas en el Concejo las Asociaciones de Vecinos Los Arenales (Castilla-Hermida) y Antonio Cabezón y Francisco Giner (Prado San Roque y Entrehuertas).

Y distintos movimientos vecinales y colectivos como las plataformas de El Pilón (General Dávila); Conciencia Ciudadana; Amparo Pérez (en recuerdo de la anciana fallecida durante su oposición a la expropiación de su casa en Las Llamas); Prado San Roque; la Asamblea para la Defensa de la Senda Costera; el Centro Obrero y Popular Bertolt Brecht y la Asociación PAH Santander.

Sin embargo, el Ayuntamiento de Santander pretende «atravesar» el patio con un vial de «dudosa justificación», como han manifestado estos colectivos en nota de prensa.

Además, señalan que «pese a la insistencia vecinal para que el concejal de obras se desplace al barrio para escuchar y dialogar con los vecinos, la única respuesta obtenida ha sido la habitual del equipo de gobierno: distancia con los vecinos, y obcecación en aplicar inflexiblemente un Plan General impuesto, que destroza a la ciudad y perjudica a sus habitantes».

«En Santander, para modificar algún aspecto del Plan hay que ser banquero, promotor o gran comerciante, como se ha visto en fechas recientes», han denunciado.

En este sentido, lamentan que «a los vecinos se les niega el derecho a influir positivamente en el diseño de su barrio y su ciudad», al tiempo que subrayan que «en una sociedad democrática los políticos han de estar al servicio de la calidad de vida de los vecinos, en lugar de servirse de ellos para imponer proyectos que la perjudiquen».

Asimismo, recuerdan al alcalde, Iñigo de la Serna (PP) y a su equipo de Gobierno que «son gestores al servicio de la población y no pueden ni deben actuar como si la ciudad fuese propiedad suya».

En este sentido, consideran «no ir al barrio a hablar con los vecinos» es un acto de «cobardía democrática», con el que demuestran «no reunir el perfil mínimo necesario para ejercer el cargo que ocupan».

Finalmente, el Concejo Abierto de Santander denuncia y reprueba la política urbanística del alcalde «por antidemocrática, no participativa y cerrada, y estar completamente orientada al servicio de promotores y constructores».