Este jueves Podemos ha vuelto a guiñarle en varias ocasiones el ojo al Partido Regionalista durante la evaluación del acuerdo que firmaron ambos partidos para lograr la investidura de Miguel Ángel Revilla el pasado verano.

En dicho pacto se comprometía el voto favorable de los tres diputados de Podemos al nombramiento de Revilla a cambio de ciertas políticas y algunas decisiones, como la de apartar de las instituciones a aquellos manchados por la corrupción.

Julio Revuelta y Verónica Ordoñez durante su intervención.

Eso derivó en que el PRC apartara momentáneamente a Francisco Javier López Marcano, salpicado por el caso Racing, aunque sigue siendo un habitual en las filas regionalistas, listo en la recámara para volver en cualquier momento.

En su evaluación, Podemos ha sido mucho más favorable de lo que había indicado los últimos meses en sus comparecencias en el Parlamento o durante el debate sobre el Estado de la Región. La diputada Verónica Ordoñez y el secretario general de la formación en Cantabria, Julio Revuelta, han manifestado su conformidad con el cumplimiento de muchos de los puntos requeridos en el pacto.

De hecho, a pesar de que el apoyo de Podemos parecía alejarse de cara a los próximos presupuestos, la formación ha asegurado que le ha solicitado al Gobierno que les dejen participar en ellos para que el Ejecutivo incluya en ellos partidas para los puntos de su acuerdo que no se han cumplido.

«No puede haber gestores irregulares», ha puntualizado Revuelta, que en el próximo ejercicio apuesta más por «liberar partidas que se han destinado a la financiación de redes clientelares», en vez de volver a incrementar impuestos y la presión fiscal. «Ahora ya no depende tanto de ingreso como de mejorar el gasto público», ha señalado.

En palabras de Revuelta, «hay alta coincidencia en las valoraciones objetivas sobre el pacto» que han hecho por su cuenta tanto Podemos como el PRC. Han valorado las actuaciones del Gobierno en materia económica para reestructurar la deuda, aunque consideran que las peticiones a Madrid «podrían haberse hecho antes» y que «se ha perdido el tiempo».

En materia social, consideran que ha habido avances en materia de igualdad y que el Gobierno se ha centrado especialmente en la emergencia habitacional. «Queda trabajo por hacer», ha matizado sin embargo Revuelta, que cree que «se ha avanzado en lo normativo más que en lo económico» en esos aspectos.

LOS ‘PEROS’ AL GOBIERNO Y QUÉ NO SE HA DICHO

En su intervención, Podemos ha tenido menos ‘peros’ de los esperados para la gestión del Gobierno, si bien les ha afeado algunas cuestiones.

«No nos consta que se haya trabajado en la exclusión de empresas y personas condenadas por corrupción», ha asegurado Revuelta, pese a que ese era uno de los puntos principales en el acuerdo.

También han afeado al Gobierno que haya tenido que ser su partido el que haya dado a conocer el contrato de las obras de Valdecilla, y que no haya hecho una labor pedagógica en condiciones sobre sus consecuencias en la ciudadanía.

Los «puntos rojos» del incumplimiento se los llevan la dependencia y la renta social básica, otros dos factores prioritarios en el acuerdo que, según su evaluación, son los grandes pendientes por cumplir.

La intervención ha pasado por alto algunos de los conflictos de estos meses, como el hecho de que el Gobierno haya tardado en proporcionar la información en su poder de los casos de Ecomasa y sobre las irregularidades de SODERCAN; o la falta de transparencia que han permitido los equipos de Gobierno en otras cuestiones, como en las intervenciones de los ciudadanos afectados por el PGOU de Santander, dentro del debate sobre la Ley de Suelo.

Podemos ha evitado algunos temas, también amparándose en que la evaluación es sobre el acuerdo con el PRC y eso de momento no incluye a los socialistas, aunque gran parte de las políticas sociales están precisamente en sus manos.

La formación ha criticado, por encima, esas «redes clientelares», como las que afectan a SODERCAN, el acuerdo con el Racing de Santander para su financiación o el rescate del puerto de Laredo.

Sin embargo, la evaluación final ha sido positiva, al menos durante este primer año, en la que se ha llevado a cabo «la parte más sencilla y que requería menos compromiso»; por lo que consideran que «el compromiso de verdad con este acuerdo se demostrará priorizando en el gasto para cumplir con puntos tan importantes como la subida de la prestación de la Renta Social Básica, la disminución del copago en dependencia y el aumento de la dotación para el Servicio Cántabro de Salud».

Para ello han pedido al Gobierno más agilidad y les han recordado que su compromiso por hacer valer ese acuerdo continuará durante toda la legislatura.